Isco no está atravesando una situación agradable en el Real Madrid. Se vio en las imágenes de la celebración del equipo en el Parque de los Príncipes. Su frío saludo con Zidane.Parece como desconectado. Ante el Eibar dejó una imagen similar. Cuando, por ejemplo, tuvo la mala suerte de chocar contra Ramis que se temió una lesión grave de rodilla. El malagueño estaba apagado porque las cosas no le estaban saliendo bien, no cayó en la cuenta de la posible lesión del compañero, como sí le ocurrió a Keylor en otro lance del juego con Kike García después, porque su impotencia no le dejaba ver más allá. A la vuelta de la esquina está el Mundial. Y pese a que el malagueño se rebeló la temporada pasada por su estatus en el equipo y ganó la partida a James, esta temporada no ha conseguido afianzarse en el once inicial de Zinedine Zidane. "Me preocupa que juegue poco", decía Lopetegui en enero.