U. de Chile
El oscuro paso de Pinilla por Vasco que marcó su carrera
En 2008 el chileno estuvo en el club carioca, al cual enfrentará por Copa Libertadores con la U. Su paso para el olvido fue un punto de inflexión.
La dilatada carrera de Mauricio Pinilla tuvo un breve capítulo en Vasco da Gama, club al cual enfrentará este martes con Universidad de Chile en el estreno de la Copa Libertadores 2018.
El recuerdo no es bueno para el delantero nacional y menos para los hinchas cariocas, que pusieron sus esperanzas en el chileno para zafar del descenso en la horrible campaña de 2008 en el Brasileirao, pero la decepción fue doble: el ariete jugó apenas tres encuentros -sin goles- y el equipo perdió la categoría.
Pinilla regresó al continente luego de su segundo paso por el Heart de Escocia, donde no pudo destacar, como tampoco lo hizo en su segunda etapa con la U en 2007. Así el atacante esperaba tener la continuidad necesaria para demostrar por qué en su momento fue comprado por el Inter de Milán.
Así el jugador de entonces 24 años arribó a Río de Janeiro en septiembre tras culminar la temporada europea, aunque ya de inicio tuvo problemas ya que el técnico Renato Gaúcho criticó el estado físico del ariete y que le tomaría al menos dos semanas ponerse a punto.
Por esto su estreno recién fue el 19 de octubre ante Flamengo y luego estaría ante Paranaense el 30 del mismo mes y contra Fluminense, el 2 de noviembre, sufriría un desgarro en el muslo izquierdo que lo dejaría fuera por el resto de la temporada.
A pesar de esta situación el club le renovó por tres temporadas más mientras el chileno aseguraba que "estoy en deuda con el club (...) tengo la certeza que en 2009 será un año muy bueno para nosotros". Pero sus deseos no se cumplirían y nunca más jugaría por la institución.
El propio Pinilla recordó la semana pasada esta etapa oscura de su carrera. "No tengo una motivación extra por tratarse de un ex club. Tengo algunas amigos allá, pero no guardo nada especial. Era el momento de dar el salto en mi carrera. Le lesión que más me marcó en mi carrera fue la que tuve con Vasco. Dejé de jugar y perdí el foco. Estuve tres meses fuera con un desgarro de 12 centímetros. Sólo cuando volví para Europa todo se recompuso".
En efecto, tras otro paso sin pena ni gloria, esta vez en Apollon Limassol de Chipre el primer semestre de 2009, el delantero volvió a Italia para incorporarse a Grossetto, en la Serie B, donde tuvo una de sus mejores temporadas con 24 goles en 25 partidos, lo cual le permitió afirmarse luego en la Serie A hasta mediados del año pasado, antes del retorno a la U de Ángel Guillermo Hoyos.
