U. de Chile
La U busca poner fin a los días más turbulentos de la era Hoyos
Tras la derrota ante Colo Colo hace diez días el ánimo y el juego de los azules no fue el mismo. En el plantel reconocen que aún no se sacuden ese golpe.
Días difíciles ha debido soportar la Universidad de Chile en las últimas semanas. Tres partidos sin ganar que parecen haberle quitado el crédito al técnico Ángel Guillermo Hoyos, y que han generado más de alguna situación compleja para el camarín azul.
Con el partido de este jueves ante Cruzeiro a la vista, en el plantel azul reconocen que lo vivido en el Superclásico ante Colo Colo les golpeó duramente, y que además de eso, no han podido reponerse de la caída en los partidos siguientes.
Primero están las situaciones deportivas como el hecho de no jugar bien y replegarse en demasía. El estilo de juego de la U ha generado un contraste de opiniones entre los propios jugadores, con críticas abiertas al modelo como lo ha hecho en un par de ocasiones el portero y capitán Johnny Herrera.
"Es un error que no podemos volver a cometer"; comentó el guardameta hace algunos días, algo que reiteró tras el empate ante Cruzeiro, en la previa de la estrepitosa caída ante Unión La Calera.
Por otra parte, las situaciones extradeportivas como la vivida en el clásico por Jean Beausejour, y las posteriores críticas de la barra hacia el volante, hicieron todavía más tensa la previa del trascendental duelo de Copa Libertadores ante Cruzeiro.
La U no lo pasa bien, y así lo reconocen los jugadores. "Las críticas se arrastran desde el Superclásico, fue una derrota que repercutió mucho. Ante Colo Colo era el momento de dar el golpe. Cuando se juegan clásicos y vas en ventaja, siempre hay que buscar más goles. Les dimos vida y eso nos costó", comentó David Pizarro en la previa del duelo en Brasil.
De todas maneras, la mejora va más allá de la cancha. "Tenemos que hacernos fuertes como institución. Nos jugamos mucho en esta pasada y sabemos la importancia que tiene. Estamos al debe en lo futbolístico. Hay que estar conscientes y hacernos fuertes como grupo. El torneo es largo y el ambiente dentro del camarín es humano y sano", sostuvo Pizarro.