Jarry paga caro sus errores y se despide de Roland Garros

La aventura de Nicolás Jarry en Roland Garros se acabó el primer día. El chileno batalló durante cinco sets frente a Jared Donaldson, sin embargo, su irregularidad y una excesiva cantidad de errores terminaron por sepultar su ilusión de avanzar por primera vez a la segunda ronda.

Fueron tres horas, donde Jarry tuvo momentos de buen tenis, pero la faltó consistencia ante un rival abordable y que le dio opciones durante varios pasajes del partido para tomar el control. Al final un 3-6, 6-4, 6-3, 3-6, 4-6,  sentencia una despedida demasiado prematura. 

El primer set fue el ejemplo de lo que debe mejorar Jarry para insertarse de lleno entre los mejores del mundo. El chileno combinó un golpe ganador y un error no forzado durante toda la primera manga, y al final salió perdiendo. Donaldson no fue mejor, no dominó, pero sólo tuvo que ser más regular para tomar ventaja. 

La buena noticia asomó en el segundo set y tercer set. Ahí apareció el Jarry capaz de competir ante cualquier rival que esté al frente. El chileno afinó su primer servicio (la mejor arma) y también la tranquilidad (su mayor problema) para afrontar el duelo punto a punto. Un quiebre de ventaja en el tercero y otro en el cuarto fueron suficientes para tomar ventaja de dos parciales contra uno.  

El problema es que aún quedaba margen, y cuando el partido asomaba favorable, Jarry desapareció otra vez. El cuarto set fue un calco del primero. Los mismos errores, las mismas desconcentraciones y el mismo final. 12 errores no forzados y sólo el 53 por ciento de los puntos ganados con su servicio fueron demasiada ventaja.  

El set definitivo encontró a Donaldson en mejor pie, y así quedó demostrado con el quiebre que logró el estadounidense en el tercer juego. Jarry se quedó sin piernas, y aunque batalló hasta el final, pagó demasiado caro sus errores ante un rival que no hizo mucho más para avanzar.