BETOÑO
La carta de un madre para que dejen jugar a su hijo autista
Su madre Zuriñe lo ha denunciado en una extensa carta que no le quieren hacer ficha. Tiene nueve años.
Zuriñe es la madre de un niño de 9 años con autismo. Un niño que entrena desde hace un año a fútbol en un equipo de Vitoria: el CD Betoño. Este martes Zuriñe publicó en su Facebook una extensa carta en la que acusaba al club de no querer hacer ficha a su hijo para jugar los partidos. En estas categorías es obligatorio que todos los chavales con ficha jueguen. Esta es la carta íntegra a la que ha tenido acceso 'Gasteiz hoy', un periódico digital de la capital alavesa.
"Un niño de 9 años con autismo, mi hijo Mikel. Su mayor ilusión: jugar al fútbol. Su objetivo: poder jugar un partido (como los demás), no habiendo faltado a un solo entrenamiento durante 1 año en un Club, sin jugar los sábados y sin perder su sonrisa. Se decide este año “darle la oportunidad” de jugarlo. No lo hace peor que los demás….soy testigo directo, no me lo han contado. Resultado: whatsapp del coordinador a día de ayer diciendo que se ha decidido que siga entrenando pero que no puede jugar partidos. Reunión por la tarde con su madre, el directivo, el coordinador y el entrenador. Alegan causas objetivas. Nadie las vemos hasta el punto de apartarle de los partidos y no hacerle ficha. En primer lugar porque se supone que con esta edad no van a jugar para Ganar exclusivamente. En segundo, porque aunque así fuera, y por muy malo que fuera, no perderían por su culpa. Estos son los valores que enseñan a los niños en este lugar? Mikel ayer noche al recibir la noticia, lloró de una manera que nadie mínimanente humano puede soportar. Preguntándonos qué ha hecho tan Mal (nada!), asegurando que se ha esforzado al máximo (como el que más!), si ha faltado al respeto a alguien, o si es un maníaco y por eso no le quieren… Hay que estar en la carcasa de unos padres que han luchado y sufrido toda la vida del niño porque esta selva social le dañara lo mínimo posible, para empatizar con lo que podemos sentir al verle así. Y más, cuando no hay razón objetiva. La única razón que no se reconoce, es su etiqueta, que no se entiende, sigue sin querer entenderse, y continúa tristemente dando miedo. Intentaron hacernos desistir de seguir de la manera más rastrera. Y sin ir de frente.
Haciendo creer al niño que ese partido significaba el principio de su sueño. Resulta que fue su final pero nunca se le dijo a qué iba, ni a su familia tampoco. Ha acabado así esta historia, un niño que quiere encajar y no se lo permiten, destrozado, con la autoestima por los suelos, buscando una culpa que no tiene, y expresando que “me han robado mi sueño”. Será posible que permitamos esto? Hasta cuándo gente de esta pasta puede estar donde está, trabajando con niños? No, no es una pataleta del crío. Él ha demostrado contar con unos valores de los que ellos deberían tomar nota. Espero que duerman bien por las noches y no se despierten llorando, como él…. “””GRACIAS”””” El club es el Betoño".
Durante el último año este niño ha sido partícipe del equipo, y se ha ido integrando en el trabajo diario en los entrenamientos sin llegar a jugar. Pero, como premio, el entrenador convocó al chaval para jugar un partido amistoso a comienzos de esta temporada, asegura el club. Esto creó en él la expectativa de que iba a poder jugar el resto de partidos: “Ha habido un problema a la hora de transmitir este premio pensando que iba a ser bueno”, aseguran fuentes del club deportivo Betoño. El entrenador ofreció al menor jugar un partido amistoso.
Zuriñe en su carta critica esta situación: “Haciendo creer al niño que ese partido significaba el principio de su sueño. Resulta que fue su final pero nunca se le dijo a qué iba, ni a su familia tampoco”. Fuentes del club han explicado a Gasteiz Hoy (información que recoge ahora AS a través de este medio) que su intención es que el chaval siga entrenando como hasta ahora y reconocen un fallo a la hora de transmitir esta situación: “Hoy mismo tiene entrenamiento”, destacan.
Zuriñe, la madre, explica en su carta que el pasado año ya estuvo entrenando sin jugar, aunque parecía que iba a poder jugar este año: “Su objetivo era poder jugar un partido (como los demás), no habiendo faltado a un solo entrenamiento durante 1 año en un Club, sin jugar los sábados y sin perder su sonrisa. Se decide este año darle la oportunidad”. Desde el club lamentan la situación creada en redes sociales. Y aseguran que la sensación que tuvieron el pasado martes tras la reunión con su madre fue positiva. El club también reconoce el trabajo realizado por el entrenador en la integración de este menor durante el último año.
Según el testimonio de Zuriñe el martes recibió un whatsapp del coordinador “diciendo que se ha decidido que siga entrenando pero que no puede jugar partidos“. Tras ello se produjo una reunión de Zuriñe con el directivo, el coordinador y el entrenador: “Alegan causas objetivas. Nadie las vemos hasta el punto de apartarle de los partidos y no hacerle ficha”. El club insiste en que su objetivo es integrar a todas las personas, e insistía en que “este caso, al igual que los demás, por su especial tratamiento, se trata de forma individual con cada familia y se busca integrar dentro de un grupo de niños a otros que por su enfermedad tienen dificultades, como es el caso”. El club insiste en que se tratará el caso de forma privada, aunque se han puesto en manos de unos abogados. La publicación de Zuriñe se ha compartido ya más de 9.000 veces en Facebook. En julio Zuriñe también denunció en Facebook un caso de bullying contra su hijo en un colegio de Vitoria.