Bárbara Riveros es ídola en el Herbalife Ironman de Pucón 2019 : se toma fotografías con cada persona que se lo pide, firma autógrafos y lanzas críticas que sacan aplausos. En ese escenario, atiende a AS para revelar sus tres mayores sueños del año: conseguir la clasificación a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, prepararse para el Ironman de Hawaii y encabezar un proyecto que permita mejorar las condiciones de los deportistas en Pucón.
- ¿Cuál será la planificación para lograr la clasificación a los Juegos Olímpicos? - No tengo realmente lo exacto de cómo va a ser el detalle, pero sí o sí competiré en las Copas del Mundo y en las series mundiales hasta mediados de año, y después, en el segundo semestre, veré si me puedo preparar para el Ironman de Hawai, en Kona.
- ¿Cuáles son las expectativas para ese evento? - No, no, voy a ir a hacer el evento y así aprovechar que logré el cupo, pero ninguna expectativa realmente muy alta.
- ¿Los Panamericanos son un buen apronte de todas maneras? Más allá de que no tenga un cupo para Tokio. - Sí, sí, pero yo creo que uno debe ser súper sabio y saber dónde jugar las cartas. Para mí, es conseguir los puntos. Y por los mismo, es mucho mejor juntarlos que llegar en cierta forma a los Juegos Panamericanos. Antes daban un cupo al que ganaba, pero ahora no dan nada. Hay que saber cómo hacerlo. Las energías son limitadas y hay que saber en qué momento debo andar bien y en qué momento bajar las cargas.
- ¿Eso, en la práctica, significa no ir a pelear por el oro? - Sin duda que el oro está muy difícil. Creo que en la última oportunidad tuve la dicha de que el plan de América funcionó. Vi la oportunidad y la tomé. Lucharé por lo mejor ese día, pero obviamente debo tener en mente que en el año hay carreras muchos más importantes y que valen mucho más. Los Panamericanos no me harán clasificar y debo ser inteligente. El objetivo es lograr buenos resultados en la Copa del Mundo, sino, el segundo semestre, no me podré preparar para Kona.
- ¿El quinto lugar en Río hizo aumentar ese enfoque en los Juegos Olímpicos? - Yo creo que es mucho más complejo en el sentido de que cada cuatro años, la dinámica va cambiando. Veremos el día y el momento en que estoy parada y ahí evaluaremos a qué aspiro. Obviamente no cierro ninguna puerta, pero hay que ser realista y honesta contigo mismo. No puedo hablar. Pienso a corto plazo, y primero debo juntar los puntos.
- ¿Te presiona el hecho de que el país la considere una de las cartas más importantes para medalla tanto en Lima como en Tokio? - No, sé que voy a dar lo mejor, pero es complicado tener una gran actuación en los Panamericanos porque hay carreras muchos más importantes. Los Juegos Olímpicos son mis sueños y mis aspiraciones personales. Obviamente que los Panamericanos son un peldaño, pero ya tengo una medalla panamericana. Y creo que uno debe ir quemando etapas. Es como que me pregunto si prefiero tener una excelente competencia en Pucón o haber clasificado a Kona. Obviamente que prefiero 10 mil veces haber clasificado a Kona. Uno no puede quedarse con los mismos desafíos, tiene que ir reinventándose. Hace cinco semanas corrí un Ironman y clasifiqué gracias a Dios. Eso uno no lo puede contar muchas veces. Uno no puede ponerse los mismos retos. Si mi objetivo es clasificar ir a los Juegos y ya logré una medalla de oro en Panamericanos, debo ver qué más queda en la lista de sueños.
- ¿Y una medalla en Tokio está en esa lista? - Obviamente eso son palabras mayores, pero por eso te digo, hay que ser inteligente y poder jugar las cartas lo mejor posible…”
- Cristian Bustos dijo que usted camino a ser una leyenda. ¿Se siente así? - (risas) no lo sé, pero yo creo que es un honor porque él es una leyenda. Si no fuera por él, el triatlón no estaría donde está y el triatlón de Pucón tampoco. Si no fuera por él, nada de esto estaría ocurriendo. Yo siempre estoy agradecida de él por su humildad, personalidad y garra. Eso no se ve tanto hoy y se extraña. Lo admiro desde pequeña.
- ¿De que forma se puede ayudar a que siga creciendo el triatlón? - Es importante saber dejar algo a la comunidad de Pucón y no solo pensar en los intereses personales. Hay que pensar en el bien común. Incluso eso es lo que me motiva estos últimos años: dejar algo. ¿Se le deja al turismo? Sí, pero en el deporte no se ha avanzado. Y lo sé, yo corrí el año 1994 por primera vez y me acuerdo que corría con Romina Chávez, los ‘Bobadilla’ y con la gente de esta zona. Ellos no tenían piscina y nadaban congelados en septiembre en el Lago. Y después de tantos años, estamos igual. Eso tiene que cambiar.
- ¿Y qué piensa hacer usted específicamente? - Quiero empujar a que salga algo. Voy a tratar de dar todo lo posible para que un proyecto se concrete.
- ¿Piensa financiar con sus recursos la piscina? - Yo podría donar todo mi premio acá, pero no alcanza. Esto es un tema en equipo. Sería genial que la organización me ayudara y que se comprometiera a entregar un cierto porcentaje de las inscripciones, y también invitar al alcalde, al Estado o a empresas privadas que puedan ayudar. Que todos nos podamos unir. Una cosa es realizarla y otra es mantenerla. Hay costos bastantes altos. Que no sea un proyecto que salga a la luz y que con los años no haya una mantención.