Los desconocidos rumbos de Wilson Contreras tras el retiro

- ¿En qué ha estado en estos últimos 16 años?
- Estuve viviendo en Paraguay y Argentina, 6 o 7 años. Después me volví a Chile por la enfermedad de mi padre y ya no quise irme otra vez. Acá hice el curso del INAF y aunque no lo terminé, puedo trabajar como iniciador.

- ¿Y a qué se dedicó en esos años fuera del país?
- Me compré un camión para reparto de mercadería, lo trabajábamos con mi suegro, pero al final eso no era lo mío. Después en Argentina estuve un tiempo con un taxi para hacer algo, porque estar sin actividad es difícil. También allá jugué fútbol de barrio. Al final me separé y le dejé todo a mi ex señora. De todas formas no me ha ido mal, se lucha como cualquier persona, porque no se puede vivir de los recuerdos.

- ¿Pudo ahorrar en sus años de futbolista?
- En Atacama ganaba solo para vivir, ya en Huachipato fue más y ahí pude ahorrar, pero los sueldos no eran como ahora. En Colo Colo guardé lo que pude y traté de invertir, pero me di cuenta que era malo para los negocios.

- Imagino que cuesta volver al mundo laboral después del fútbol...
- Los primeros dos años es difícil asimilar que ya no eres parte del fútbol profesional, duele no sentir el camarín, además que en la vida laboral normal la plata es muy diferente. Uno ganaba un sueldo elevado y después del retiro se lleva otra vida. Muchos siguen con esos lujos de futbolista y gastan de más, pero afortunadamente eso a mí no me pasó.

- ¿Y en qué está trabajando ahora?
- Ahora último estuve cinco meses trabajando de rigger en la minería. Eso consiste en que la persona que maneja el camión levanta o deja la carga y uno le da las indicaciones. Sin embargo, lo dejé porque eso no era para mí. Ahora vuelvo a Vallenar a trabajar con los niños, ya hablé con el Alcalde. Eso es lo que me gusta hacer.