Chile suma un pobre empate y no logra encontrar el camino
La Roja se levantó del descalabro ante México, mostró pasajes de buen fútbol, pero no convence en su último duelo antes que Rueda dé la nómina para Copa América.
Chile cerró su gira por Estados Unidos con un pálido empate (1-1) que al menos le permitirá a Reinaldo Rueda trabajar más tranquilo. Quizás sea la mejor noticia de este duelo, el último previo a entregar la nómina definitiva para Copa América. La Roja tuvo pasajes de buen fútbol, se levantó del descalabro ante México, pero sigue sin haber un diagnóstico claro sobre su real estado.
El técnico se tomó enserio la última chance para experimentar y salió a la cancha en Houston con un inédito 3-6-1, además de cuatro cambios en la formación. Gonzalo Jara, Óscar Opazo, Esteban Pavez y Diego Valdés entraron desde el comienzo. Los primeros tres cumplieron. Valdés sigue sin dar el ancho.
A Chile también le costó entrar en ritmo. Y cómo no. Sí a los tres minutos se encontró con un 1-0 en contra que dejó en evidencia todos los problemas defensivos que posee. Pulisic, el nuevo fichaje millonario del Chelsea, le ganó a todos en velocidad, se fue recto en dirección al arco y definió por encima de Gabriel Arias, que se vio lento en el achique.
La buena noticia es que el gol despertó al equipo, que intentó a acorralar a los locales a partir del trabajo de Isla y Opazo en las bandas. El más efectivo fue el ‘Torta’, quien se encontró con una pelota suelta en el área, y definió con un disparo cruzado que levantó otra vez el espíritu. Un buen momento que se extendió también por la lesión de Pulisic.
Tras la vorágine del primer cuarto, La Roja pudo exhibir durante algunos minutos el juego que más lo reconoce. Tuvo la posesión de la pelota, y la virtud de generar algunas sociedades en mitad de cancha que lo hicieron un equipo más compacto. Tuvo, además, el sacrificio de Nicolás Castillo, que aguantó, cedió, y tuvo en un disparo frontal la otra clara del equipo en la primera parte.
Chile duró un tiempo
La segunda mitad encontró a la Roja con el ánimo en alza, pero incapaz de sortear la rudimentaria y eficaz defensa estadounidense. Luego de un inicio prometedor, el equipo perdió otra vez la esencia. Rueda tuvo echar mano entonces al banco para intentar refrescar a un equipo que a los 60 minutos que parecía sin fondo físico, e incapaz de tomar buenas decisiones en el último tramo.
El ingreso de Sebastián Vegas y Erick Pulgar no cambió mucho las cosas. Chile mantuvo el orden defensivo, construyó bien en la salida, pero cada vez que debía generar peligro no pudo. Al mirar el banco tampoco había muchas opciones. Ni Diego Rubio, que ingresó los últimos minutos, pudo generar una mayor compañía para Castillo.
Los últimos minutos encontraron a Chile desgastado y a Estados Unidos sin la necesidad de ir a buscar un resultado mejor. El resumen fue un final predecible, un empate mediocre, y un cierre de gira que tiene a Rueda bajo presión, pero con margen para mejorar las cosas antes de su primer gran desafío: la Copa América.