ADN RadioConcierto Radio
NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

River Plate, el equipo ideal para Paulo Díaz

Marcelo Gallardo, DT de River Plate, fue súper claro después del partido en que su equipo se impuso por penales ante Gimnasia y Esgrima de Mendoza en la Copa Argentina. Empleando la poderosa plataforma que son los medios de comunicación deportivos en el país trasandino, el entrenador les pidió a los dirigentes un esfuerzo máximo por conseguir el fichaje de Paulo Díaz. Gallardo quiere sí o sí al zaguero chileno en el equipo y no le hace el quite a 'meterles presión' públicamente a los directivos.

Díaz dio el gran salto en su carrera a nivel local en 2015. Ya había despuntado previamente en Palestino actuando en los cuatro puestos de la defensa y también en la posición de volante central. Pablo Guede, el responsable de su multifuncional aparición en el fútbol chileno, lo pidió para Colo Colo y con solo 20 años fichó en el Cacique en mayo de 2015. 

Un esguince de rodilla cuando aún no había debutado aplazó su estreno para agosto de ese año. Jugó en el 1-1 contra Coquimbo por la Copa Chile y luego otra dolencia en el tobillo y el peroné lo volvió a marginar. Nadie lo imaginaba en ese momento, pero los contratiempos físicos, tal vez, anunciaban que su paso por el Monumental, al margen de sus atributos futbolísticos, iba a estar marcado por la irregularidad. Finalmente así aconteció.

Díaz solo alcanzar a estar algunos meses en Colo Colo. Otra vez Guede lo volvió a llamar para estar bajo su mando, confiando nuevamente en su seguridad en la marca, gran juego aéreo, claridad con el balón y personalidad en la cancha. Esta vez dirigido y entrenador se volvieron a juntar en la exigente liga de Argentina, defendiendo a San Lorenzo de Almagro.

En un fútbol con una exigencia brutal y a los 21 años esa liga bien pudo haber sido una tumba para su carrera. Por lo visto allá también con jugadores nacionales nóveles que fueron a probar suerte y les fue mal, con la honrosa excepción por supuesto de Alexis Sánchez en River Plate. Sin embargo, en Argentina Díaz explotó.

Lo hizo bajo un molde parecido al utilizado en Palestino. Se paseó por los cuatros puestos de la defensa, aunque esta vez actuar sistemáticamente en el mediocampo quedó excluido. Brilló más en la posición de lateral, debido al atavismo argentino de alinear tipos experimentados en el centro de la zaga (lentos y débiles en el uno contra uno, pero con gran voz de mando). Se hizo fama de defensa seguro, veloz, ágil, cabeceador y sin estridencias en el manejo del balón.

Con Guede ahora al mando del Al-Ahli de Arabia Saudita ya no llamó la atención que de nuevo el DT solicitara su fichaje en el club. Cada vez que el argentino lo pidió el resultado fue satisfactorio. La excepción, en esta oportunidad, fue que al poco tiempo de la llegada de Díaz a Medio Oriente Guede se marchó. 

Hace días surgió la información de que el Crystal Palace tendría intenciones de llevar al chileno a la Premier League. La posibilidad cautiva, pues esa competencia hoy es la más atractiva del mundo. Sin embargo, lo más prudente es volver a Argentina y jugar en River Plate. En un fútbol de centrales 'grandotes', como el británico, terminará actuando de lateral o volante. Algo similar le pasó a Gonzalo Jara en Inglaterra. Claro, Díaz es mucho más cabeceador, pero por allá son más bien conservadores en las resoluciones tácticas.

El chileno posee un prestigio ganado en el fútbol trasandino. Llegó siendo un desconocido, un fichaje expreso de Guede, quien no dudó en su potencial. Allá, nadie le regaló nada y se impuso en silencio en un medio históricamente adverso para los nacionales. Que el campeón de América lo busque, por deseo manifiesto del prestigioso DT que es Gallardo, al margen de lo que vaya a pasar finalmente con el fichaje, eso ya debe ser un triunfo para Díaz.