Las 3 falencias que desataron la crisis futbolística en Colo Colo
Los albos no han ganado ni anotaron en la vuelta del torneo, lo que deja en evidencia el mal momento que cruza todas las líneas del cuadro dirigido por Mario Salas.
Colo Colo cayó por 1-0 ante O'Higgins en Rancagua. Los albos llegaron al Estadio El Teniente con la idea de elevar el bajo nivel exhibido tras la reanudación del Torneo Nacional, pero el equipo dirigido por Mario Salas no logró salir del mal momento deportivo
El DT no consigue dar con la fórmula para modificar al panorama adverso y la dos derrotas consecutivas no son casualidad, pues antes ya había caída de local frente a Curicó. Los albos deambulan en la cancha sin una partitura de juego definida, evidenciando claras falencias futbolísticas.
Ataque nulo
El Cacique no ha anotado goles durante el torneo en su vuelta a la actividad competitiva. Salas detectó el problema y, en los tres duelos disputados, jamás repitió el mismo trío de atacantes, pero la solución no tuvo efecto.
Los delanteros externos se centralizan en exceso, dejando el ataque por las puntas exclusivamente a los laterales proyectados. Entonces, en lugar de atacar con dos hombres por esa zona, Colo Colo lo hace solo con uno, lo que le resta peso en ofensiva.
Baja gestación
Carlo Villanueva en un momento insinuó alzarse como un alternativa viable en lugar de Jorge Valdivia en la posición de volante ofensivo. Pero la falta de constancia en su accionar provocó que otra vez el Mago apurara su regreso ante O'Higgins, terminando expulsado.
Lo concreto es que el mediocampo albo es demasiado predecible, con una circulación del balón pausada y pocas maniobras de 'Tocar y pasar'. Esto deja sin opciones de juego a los atacantes y Colo Colo no trasciende en la zona ofensiva.
Fragilidad atrás
La tónica en los tres partidos del Campeonato Nacional disputados por el Cacique ha sido que a los albos los han atacado poco. Sin embargo, las pocas llegadas de sus rivales no han significado que el equipo de Salas no haya corrido peligro.
Principalmente debido a la permeabilidad del bloque defensivo en las maniobras de retroceso, sin cerrar los espacios centrales, quedando vulnerable a los pases a la espalda. Así cayó ante Curicó y, contra Everton y O'Higgins, también tambaleó en la última línea.
