El plan europeo que estudia Karen Araya tras la Libertadores

-¿En qué ve reflejado ese trabajo del que habla?
-"Que se estén preparando con los mejores. Tiene técnico, ayudante técnico, kinesiólogo... entonces te das cuenta que el fútbol femenino ha crecido. Quizás no como en otros lugares, pero sí se ve que se está profesionalizando". 

-¿Cambió mucho entre su ida a Europa y su regreso ahora?
-"La verdad es que es un cambio grande. Cuando me fui ningún equipo nacional tenía mucho y hoy me encuentro con una liga profesional, que tiene Segunda División con contratos de por medio, seguro médico y esas son cosas muy importantes. Te puedo nombrar un sinfín de cosas que quizás son mínimas pero ayuda con se profesionalice. 

-¿Cuánto valor le da a la generación mundialista para estos cambios?
-"El fútbol femenino marcó un antes y un después y eso nos hace sentir importantes. Para que la mujer saque la voz, con la igualdad de género.

-¿Asimiló lo conseguido en Francia?
-"Al principio no te das cuenta, pero llegas a tu casa o en la calle y la gente te dice 'Karen una foto' y antes era una completa desconocida. Ahora te das cuenta que has generado un cambio, tengo infinita gente que te escribe por redes sociales y trato de responderles porque toman parte de su tiempo para darme buena vibra y eso te da una satisfacción muy grande". 

-¿Tenía chances concretas de seguir en Sevilla antes de regresar a Chile?
-"Sí, sí. Mi entrenador en Sevilla me dijo que renovara y quería que fuera la capitana del equipo, eso quiere decir que hice las cosas muy bien en España. Pero hablé con él y le dije 'no te sirve una jugadora que está pensando en Chile extrañando su familia'. Me dijo que no me preocupara y que habláramos en diciembre cuando se abra la temporada de fichajes. Quizás después de la Copa Libertadores y del fin del Campeonato Nacional, vuelva a España y esté allá otra vez".

-¿Y en la Roja por cuánto tiempo más se proyecta?
-"Yo creo que ahora es el momento en el que la Selección no puede decaer. Tiene que seguir de la misma manera, con la misma fuerza e incorporando niñas porque nosotras no seremos para siempre. En algún momento tendremos que dejarle espacio a las que vienen más atrás con más ganas. Yo espero poder jugar hasta que las piernas me den, pero el día que ya no se pueda tiene que haber un respaldo con las niñas que vienen de más abajo. Eso es muy importante. La Selección está preparándose con una Sub 15, Sub 17, Sub 20 y trabajando en la adulta. Antes era impensado".