El desconocido examen para verificar la edad de los Sub 17
Cuatro jugadores de la Roja fueron sometidos a un control sorpresivo de la FIFA en Brasil. El objetivo es evitar fraudes con la edad biológica.
Era una jornada tranquila para la Roja Sub 17 en Goiania, cuando hasta el Hotel Clarion, lugar de hospedaje de la selección chilena, llegó una comitiva de la FIFA a realizar un examen sorpresa a cuatro de los jugadores del equipo.
Los sorteados fueron Nicolás Garrido, Diego Carreño, Alexander Aravena y Kennan Sepúlveda, quienes debieron someterse a una resonancia magnética a la muñeca (IMR), prueba que lleva adelante el organismo desde el año 2009 para verificar la edad biológica de los jugadores y prevenir fraudes con ello.
A través de la resonancia, se puede determinar la edad osea de un jugador, mediante la examinación del cartílago episifario que permanece abierto durante el crecimiento y que se cierra aproximadamente a los 17 años.
Así, se verifica que no esté completamente cerrado y, de estarlo, es porque el jugador ya superó los 17 años.
La medida comenzó a llevarse adelante debido a las dudas que generaban principalmente las selecciones africanas en los torneos antiguos respecto a la edad de sus jugadores, quienes eran inscritos a veces años después de su nacimiento, sacando ventaja física por ello.