La historia oculta del traspaso más curioso del fútbol chileno: de la U a Colo Colo en 7 días
Mauricio Donoso remeció el mercado de fichajes del 2003. "A inicios de la semana era de la U y a fines de la siguiente estaba en Colo Colo".
Mauricio Donoso fue un talentoso jugador que vivió algunos de sus mejores años en Cobreloa y que siempre estuvo en la mira de los grandes. Tras un paso por Pumas de México le llegó la opción y fichó en la U, aunque tiempo después sería protagonista de uno de los traspasos más curiosos del fútbol chileno.
La frase que apuró su salida de la U: "63 de mayo"
Donoso llegó a los azules en 2002 y en el primer semestre del año siguiente fueron eliminados ante la Universidad de Concepción en playoffs tras una recodada rabona de Mauricio Cataldo. Eso caló hondo en las alicaídas arcas de la U y provocó que los jugadores no recibieran sus sueldos. Ahí, Donoso fue uno de los que expresó con dureza su molestia.
"Estábamos fuera del torneo y de haber pasado de fase jugábamos con Colo Colo. El doctor (René) Orozco tenía presupuestado jugar ese clásico y pagarnos, pero como fuimos eliminados, practicamente nos echó la culpa a nosotros de no recibir el sueldo. Lo encontré desubicado y fuera de lugar. Salí caliente de la reunión y se me ocurrió decir ante los medios esa frase: 'Es 63 de mayo y todavía no nos pagan'", recuerda.
Después de eso, su continuidad en la U era imposible. Y Colo Colo se movió rápido. "No podía decir que estaba listo, porque si el doctor (Orozco) sabía que me iba al archirrival no me iba a querer pagar el finiquito". Una vez que recibió su dinero, 'Papelucho' remeció el mercado con un traspaso nunca antes visto.
"Tenía que salir por otro lado del estadio, los hinchas me iban a buscar a las prácticas"
Donoso recuerda que su llegada estuvo llena de dificultades, sobre todo porque en su primer Superclásico como jugador del Cacique perdieron 4-0. "(Marcelo) Espina se lesionó y ocupé su lugar. Fuimos un desastre, perdimos 4-0 y la gente se fue encima mío. Decían que era de la U y que por eso había jugado mal. Recuerdo que tenía que salir por otros lados del estadio porque los hinchas iban a buscarme a las prácticas", confiesa.
Sin embargo, pese a este mal inicio recalca que "después me fui sintiendo mejor, me acomodé al estilo de juego de Jaime Pizarro y aparecieron los goles. Hasta el día de hoy el hincha de Colo Colo me trata bien".
Al final, obtuvo dos subcampeonato con los albos y su etapa finalizó en 2005. Fue a Everton y luego tuvo una destacada participación en el histórico título de Deportivo Quito en 2008. En su regreso a Chile pasó por Iquique y en 2012 se retiró mientras defendía a Coquimbo.