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TORNEO NACIONAL

La historia del neoyorquino de la UC que hoy brilla en el norte

Andrés Souper, volante de Antofagasta, es una de las figuras del campeonato chileno: "¿Si me llaman de Estados Unidos? No, yo quiero jugar por la Roja".

La historia del neoyorquino de la UC que hoy brilla en el norte
Cristian Rudolffi/Photosport

Andrés Souper tiene 21 años, nació en Nueva York y es sin duda uno de los hombres del momento en el fútbol chileno. El volante, cuyo pase pertenece a la Universidad Católica, es figura de Antofagasta, equipo que pelea codo a codo por el título.

En la última fecha, el mediocampista marcó dos tantos en la victoria sobre Unión La Calera por 3-1 y de inmediato surgieron las voces que pedían una chance para él en la Roja. Él, en todo caso, se toma todo con calma.

"¿A qué atribuyo mi buen momento? Yo creo que a la confianza que me entregó el técnico (Héctor Almandoz) y mis compañeros. Estoy en Antofagasta porque a principio de año mostraron mucho interés en mí. Tuve otras opciones, pero ellos insistieron y por eso elegí venir para acá", cuenta en diálogo con AS Chile.

Ahora, los "Pumas" tienen la primera chance para quedarse para siempre con su carta, pues manejan una opción de compra a su favor por un monto no muy elevado. Así las cosas, es posible que Souper no vuelva al club donde se formó.

"Mi objetivo el día de mañana es jugar en Europa. Católica es el mejor club de Chile en este momento, me formé ahí y le tengo mucho cariño. Sería bonito jugar ahí, pero también sería bonito jugar en otro club grande o quedarme en Antofagasta. No me quedó una espina con la UC, pero no escondo que sería lindo volver. Igual, desde que salí a préstamo a Valdivia y Puerto Montt me di cuenta que hay otros caminos", asegura.

- Todos dicen que usted es "10", pero en Antofagasta también ha jugado como volante mixto. ¿Dónde se siente más cómodo?
- Los últimos partidos estoy jugando más de "10", pero antes venía actuando como mixto. Si me preguntan, me acomoda más jugar de enganche, aunque estoy dispuesto a jugar donde me pidan. Algunas veces jugué como "falso puntero" y ahí me costó un poco más, pero dentro de la cancha estoy siempre cómodo.

- ¿Se ilusionan con el título?
- Sí, nuestro objetivo es el título, nos propusimos hacer historia. Este es un grupo especial de personas y futbolistas. Tenemos mucho talento y sabemos que es una gran oportunidad más allá de que hay equipos muy buenos. Si no se puede, mínimo entrar a copas internacionales.

- ¿Cómo se ha tomado la "fama"?
- Es algo nuevo para mí, me he topado con noticias y recién estoy viendo cómo lo llevo. Igual no le he dado mucha importancia, sé que esto va y viene. Si juegas bien te elogian y cuando bajas, te critican. Trato de no escuchar, pero sé que es un reconocimiento a mi trabajo y que a la gente le está gustando cómo juego.

- ¿Se ilusiona con la Roja? ¿Un microciclo al menos?
- Sí me ilusiono, no tiene nada de malo ilusionarse, pero llevo menos de 10 partidos como titular en Primera División. Considero que lo estoy haciendo bien, pero lo puedo hacer mejor. Si sigo creciendo como jugador, se me puede dar esa posibilidad.

- Reinaldo Rueda no ha mirado mucho a Antofagasta...
- Llamaron a Jason Flores hace poco, que muy merecido lo tiene, pero creo que en Antofagasta hay muchos jugadores que deberían tener una oportunidad, como Marcos Collao, Branco Ampuero o Ariel Uribe, por nombrar algunos. Si estuvieran en otros equipos tendrían otro escenario para ir a la Roja.

- ¿Han tocado ese tema en el plantel?
- Hace ruido dentro de nosotros, porque parece que cuesta más que te llamen que a los jugadores de equipos grandes. En ese sentido hay una sensación de "desesperanza", pero tampoco es el gran tema ni lo hablamos tanto.

"No iría a la Selección de Estados Unidos, yo quiero jugar por Chile"

Andrés Souper nació en Nueva York, pero él se siente 100% chileno. "Mi familia es toda de Chile. A mi papá lo mandaron a trabajar allá y se fue con mi mamá, en eso nací yo. Es lo único que tengo de estadounidense", cuenta entre risas.

- ¿Hasta qué edad vivió allá?
- Mis papás siempre me corrigen, pero yo tenía dos años y medio cuando volví a Chile. De ahí nunca más regresé a Estados Unidos. No tengo ningún recuerdo.

- ¿Le gustaría jugar en la MLS?
- Puede ser, quizás para aprovechar mi nacionalidad. Sería un buen trampolín, porque hoy la MLS ha crecido mucho. Ahora, si lo pienso bien, me imagino más retirándome allá, aunque no descarto nada.

- ¿Y si lo llaman de la selección de Estados Unidos?
- (Ríe) No, yo quiero jugar por Chile. No tendría nada que pensar.