El argentino Gonzalo Sosa de Melipilla tiene 31 años y una larga trayectoria, pero posee la particularidad de que nunca ha jugado en Primera División. De hecho, en su país de origen paso por cuadros de la tercera categoría como Barracas, Colegiales, Guaraní Antonio Franco o Gimnasia Concepción.
En esos clubes vivió de todo y su vida se marcó para siempre. Por lo mismo hoy, que es el segundo máximo anotador de la Primera B con 11 goles y tiene varias ofertas, no olvida sus orígenes y todas las vallas que debió sortear. "Hubo equipos donde estuve hasta cuatro meses sin sueldo y en esas divisiones lo que ganas sirve solo para vivir con lo justo y mantenerse", confiesa en diálogo con As.