Las dos vidas de una 'Diabla': volver a jugar y trabajar en un hospital durante la pandemia
Francisca Tala, seleccionada nacional de hockey césped, tuvo una lesión y hace una semana logró volver a las canchas en una serie de partidos frente a la sub-23 de India.
Francisca Tala está de regreso. Luego un año y siete meses, y una rotura de ligamento, la seleccionada chilena de hockey césped se volvió a calzar la camiseta de Las Diablas. "La verdad, pensé que me iba a dar ansiedad, pero lo viví como si nunca me hubiese lesionado", cuenta tras su estreno ante India.
"Soy una jugadora fanática de mi deporte, entonces estaba con muchas ganas de jugar, pero no con miedo", profundiza sobre el largo camino para volver. "Creo que todavía puedo mejorar mucho, pero no me sentí como en mi peor momento como en alguna vez estuve".
- ¿Cómo fue el trabajo mental que tuvieron como equipo para estos amistosos? No jugaban contra otra selección hace bastante tiempo.
- Nosotras trabajamos constantemente con una psicóloga deportiva. Trabajamos a diario los objetivos de cada una. En grupo también tenemos actividades. Ahora este último tiempo no hemos tenido tanto, pero entre nosotras mismas trabajamos lo psicológico a diario. Nos motivamos entre nosotras y es más fácil. Esto es un deporte colectivo, apoyarnos constantemente hace mucho más grato.
- ¿Cómo le afectó la pandemia a la hora de tener que entrenar y tener que cuidarse?
- En lo personal estuve toda la pandemia yendo al hospital. Estudio medicina, fui voluntaria en la pandemia y me alejé un poco del deporte. Siempre me mantuve activa, pero bajó un poco mi rendimiento en comparación a mis compañeras. Creo que puede ser por menos descanso, menos horas de sueño. Pero nada, eso me mantuvo firme de cabeza como para volver a motivarme y una vez que nos dejaron volver a entrenar estuve lista, poniéndome a punto nuevamente para poder jugar a la par con mis compañeras.
- Cuando tuvo que trabajar durante la pandemia ¿sintió su real labor de doctora? ¿Sintió una carga emocional al ver todos estos casos?
- La verdad es que fue súper duro. Es que yo trabaje como técnico en enfermería, más que como doctora. Yo fui a lo que fuera. A mi me dijeron que se necesitan manos acá y yo iba a trabajar en lo que se necesitara. La verdad fue durísima la experiencia. Me fui de mi casa, vi a mucha gente muy grave, entre otras cosas. En el momento uno no se da cuenta de lo que está pasando, pero ya después reflexionando uno se da cuenta que en verdad es impactante lo que vivimos.
- Y esto llevándolo esto a sus entrenamientos ¿no sintió que la distrajo o afectó directamente a lo emocional?
- Creo que no. Me sirvió mucho para aprovechar cada minuto. Vivir al máximo, aprovechar que estoy bien, estoy sana, que tengo esta posibilidad de seguir compitiendo, seguir entrenando. Cada vez trato de propagar a mis compañeras a ser responsables, de cuidarnos para no perder la oportunidad de seguir entrenando y jugar estos partidos.
La ilusión de las Diablas
Chile será sede de la Copa Panamericana 2022. Es por esto que las seleccionadas nacionales comparten esta alegría y ven esto como la gran oportunidad para poder clasificar al anhelado Mundial. En la conversación que tuvo Sofía Filipek y Francisca Tala con AS Chile, ambas comentan la emoción que tienen y cómo se deben preparar.
"Es un orgullo la verdad poder jugar ese torneo en Chile. Es la oportunidad más clara que vamos a tener para ir al Mundial en la historia de Chile y la tenemos que aprovechar muy bien. Para eso nos tenemos que preparar muy bien todos estos meses", comenta Filipek.
Su compañera, Sofía Filipek la respalda. "Al final no tener una cancha propia con la selección te limita mucho en los horarios que uno puede entrenar. Esto va a favorecer mucho al hockey, porque al final es un lugar donde va poder entrenar gente de otros sectores de menores recursos y va ser buenísimo".