Católica cae y complica la clasificación a octavos

 Se volvió a complicar Universidad Católica, a pesar de mantener (de momento) el segundo lugar del Grupo F de la Copa Libertadores, tras caer por 1-0 frente a Nacional de Montevideo como visitante

El partido comenzó sin un claro protagonista, con Nacional ejerciendo una presión en tres cuartos de cancha, sin dejar jugar con libertad al fondo de Católica, que durante largos pasajes del primer tiempo vio cómo se le dificultaba la salida.

Con el paso de los minutos, los equipos pasaron a compartir la posesión del balón, pero sin poder traducirlo en llegadas. Durante la primera media hora, ninguno de los dos porteros fue exigido.

Eso sí, a los 31 minutos, el elenco local aprovechó un contra ataque, tras un saque de esquina en favor de la UC. Fue Brian Ocampo el que comandó la contra, hizo una conducción de casi 50 metros y cuando parecía que asistía en la medialuna del campo contrario, se acomodó para la derecha y la clavó para decretar el 1-0.

El equipo chileno acusó el golpe y sobre el final del primer tiempo se aproximó con un débil remate de zurda de Fernando Zampedri y sendos remates de Ignacio Saavedra (al palo) y Marcelino Núñez (desvió) desde la medialuna.

Para la segunda parte se esperaba que el conjunto cruzado saliera a buscar el empate, pues así aseguraba participación internacional para el segundo semestre. Sin embargo, le costó mucho. Gustavo Poyet recién hizo ingresar a Clemente Montes al minuto 52 (por un bajo Gastón Lezcano), pero ni aún con el ingreso del canterano pudo darle otra dinámica a su equipo.

La más clara (y prácticamente la única de peligro real) que tuvo la UC fue a los 76 minutos, cuando Luciano Aued desbordó y un manotazo de Sergio Rochet dejó la pelota servida, delante del área chica, pero Diego Valencia le dio muy incómodo y elevó ante la sorpresa de todos.

Nacional siguió en su línea, buscando un nuevo contra ataque. A veces solo le sirvió para desahogar y en otras para acercarse al segundo gol, particularmente mediante Gonzalo Bergessio y Leandro Fernández, aunque siempre respondió Matías Dituro.

Católica tampoco cambió la cara. Si se vio desesperación e insistieron con los balonazos al área, pero sin ninguna claridad que le permitieran ilusionarse con el empate en los últimos minutos de partido.