De abandonar Wanderers a ser figura en Everton: el camino del defensa 'goleador'

- Contando Copa Chile llevan 13 partidos invictos y siete duelos sin conceder goles en el Torneo Nacional, ¿a qué se debe este gran momento, especialmente en la zona defensiva?
- Yo creo que es el compromiso que tiene el equipo. Se han rotado nombres y se ha mantenido el mismo trabajo atrás. Es un trabajo en general del equipo, que se está esforzando. Desde los delanteros al arquero todos estamos haciendo un buen trabajo. También es mérito del cuerpo técnico que trabaja de buena forma durante la semana.

- Lleva tres partidos seguidos anotando, ¿cómo se toma esta faceta goleadora?
- Me la tomo con calma y tranquilidad. Trabajamos de buena forma el juego aéreo. También me llena de confianza el poder marcar. Con Ñublense estuve ahí de poder marcar el segundo gol. Voy muy convencido en busca del gol. Se me ha dado, gracias a Dios. Espero seguir marcando en los partidos que vienen, eso le da un plus extra a mi juego.

- No es normal que un defensa central lleve tantos goles, ¿qué le han comentado sus compañeros?
- Aquí los compañeros me dicen ‘goleador’, donde llevo más goles que algunos que juegan arriba (se ríe). El PF me dice que es suerte, que me estoy encontrando con la pelota. Yo estoy tranquilo, al final el objetivo es ganar. Al que le toque anotar pasa a segundo plano. Lo importantes es que sigamos sumando de a tres en la tabla. El balón detenido lo hacemos pensando en que alguno de nosotros llegue a marcar.

- El proceso del equipo junto a Roberto Sensini no partió muy bueno, pero de poco fueron agarrando vuelo y los resultados están a la vista, ¿se ilusionan con un título?
- Al comienzo no me tocó empezar jugando porque una semana y media antes de que comenzara el torneo tuve con muchos síntomas de Covid-19. Estuve en mi casa, muy mal de salud y me sentía pésimo. Al volver ya iba a jugar los compañeros que venían entrenando. Quizás por ahí faltaba acomodar el equipo, buscar un mejor sistema, y la línea de tres comenzó a dar resultados y el equipo empezó a trabajar en esa tarea. El equipo está tranquilo, con los pies en la tierra. Todos sabemos que la tabla está muy apretada, pierdes un partido y puedes quedar hasta noveno.

- ¿Qué impacto ha tenido en usted tener a su lado a una figura como Julio Barroso?
- Siempre lo vi como algo positivo. Julio ha sido muchas veces campeón y es un jugador con bastante experiencia, que te ayuda mucho a aprender de él. Lo mismo que me toco con Cristián Suarez, que a mí me ha marcado mucho. Me tocó empezar jugando con él y la verdad es que es un gran compañero. Nunca me dijo nada, siempre me apoyó y dio toda la confianza. He tenido la suerte de tenerlos dos grandes jugadores de mucha experiencia que me han ayudado mucho. Julio me ah ayudado con el tema de la línea de tres, para soltarme un poco más y avanzar. También estuvo Jhonny Herrera, con quien aprendí harto.

- Con su buen nivel han empezado a salir comentarios sobre una posible nominación suya a la Roja, ¿cómo ve un posible llamado a la Selección, pensando también que en su posición hay mucha competencia?
- Hay buenos y muchos jugadores en esa zona donde estoy, así que si me toca ir tendré que competir de igual a igual. Haciendo las cosas bien van a llegar solos los llamados. Tengo que mantener una regularidad en buen nivel y, si llega un llamado, bienvenido sea. Primero tengo los ojos puestos en Everton. Un llamado a la Roja sería un premio al esfuerzo y sacrificio que hago día a día.

- Usted tiene una relación particular con Daniel González de Wanderers, son casi vecinos. ¿Ha podido hablar con él, a propósito del delicado momento de su equipo?
- Si, yo lo conozco porque la familia de él es casi vecina con mi familia por parte de mamá. Son muy conocidas allá en Valparaíso. Cuando era chico mi mamá iba para allá y me tocó compartir con el ‘Dani’. Ahora nos mandamos uno que otro mensaje, pero no hemos hablado ni tampoco nos hemos topado. Cuando chico, cuando yo estuve en Wanderers, nos íbamos juntos con mi papá y después volvíamos de entrenar con su mamá.

- ¿Por qué se dio su salida del cuadro caturro?
- Fue básicamente porque no jugaba y yo quería jugar. Era un niño ilusionado y quería tener minutos. Ahí busque una oportunidad en Everton. Decíamos con mi papá que cuando se cierra una puerta a veces se abre un portón gigante.

- ¿Con qué delantero que le tocó enfrentarse le hizo su labor más difícil?
- Cuando jugamos con Colo Colo en Santiago, Iván Morales corría todas las pelotas y hacía hartas diagonales. Te obligaba a retroceder y salir con él cuando se recogía. También esta Holgado, que es fuerte, rápido y habilidoso.

-¿Cuáles son sus sueños en el fútbol?
- Mis sueños, junto con el de mi padre, que ya falleció, era poder llegar a jugar en Europa. Poder triunfar y tener una buena carrera. Ese es mi sueño: poder jugar en Europa.

- Por como lo describe, me imagino que debe haber sido un golpe muy duro el perder a su padre…
- Si, mi papá era mi mejor amigo. Me llevaba a entrenar, veíamos fútbol juntos y teníamos un sueño compartido. Fue un golpe fuerte porque éramos muy unidos y teníamos una relación espectacular. Hasta el día de hoy no he podido superar su muerte. Trato de jugar todos los partidos de la mejor forma para que mi papá pueda verme. Yo sé que él está viendo desde el lugar donde esté. Debe estar viéndome todos los partidos, siendo el más feliz.