El paraguayo que brilló en clubes chilenos y le anotó a la Roja: "Me gustaba el roce y no achicarme"

-Paraguay ha sacado buenos resultados en Santiago anteriormente. ¿Cree que repetirá la estrategia de defender mucho y atacar poco pero con peligro?
-Ojalá que siga esa racha de buenos resultados en Chile. Es difícil pronosticar un partido antes, porque en el fútbol dos más dos no es cuatro. Hay que jugar, hay que ver cómo amanecieron las dos selecciones ese día. Ahí se verá cómo puede desarrollar su juego cada uno de los equipos.

-¿Cómo ha visto a Chile desde la distancia? ¿Concuerda en que el ciclo del bicampeonato de América está concluyendo?
-Sí, creo que sí. Yo ya di esa opinión antes de que pasara lo que hoy está viviendo Chile. Dije que la Selección en un momento iba a caer, porque ya han cumplido su ciclo algunos jugadores importantes que han ganado dos Copas América. Van pasando los años y no hay mucho recambio. Entonces, eso les está pasando a Chile, igual que a Paraguay. Nosotros tuvimos una muy buena camada, hicimos buenas Eliminatorias y clasificamos al Mundial, y también nos cuesta. A Paraguay le ha costado el recambio, no hay un liderazgo como antes había en nuestra selección.

-¿Qué le ha parecido la labor de Eduardo Berizzo al mando de Paraguay?
-La verdad es que no ha gustado, el público paraguayo es exigente. Se acostumbró a clasificar a los Mundiales y con Berizzo no se ha encontrado una forma de juego y no hemos avanzado mucho. Ha recibido críticas de toda la prensa y del público aficionada de acá. El comentario que surge es que no hemos avanzado mucho con Berizzo.

-¿De todas formas siente que Paraguay va a estar disputando hasta el final la opción de ir al Mundial?
-Seguro, yo creo que eso está en la mente de los jugadores, poder levantarse, sacar adelante esto. Hasta que den las matemáticas, sumando puntos, creo que Paraguay todavía tiene opción. Ganando los partidos, sacando puntos, todavía no está eliminado. Hay puntos en disputa todavía y si logra sumar, va a estar ahí. Esa es la idea de todos los paraguayos.

-¿Cómo ve la opción de que Chile también pueda ir a Qatar?
-Siento que la situación allá puede ser igual que acá. Se piensa que Paraguay no va a ir al Mundial por cómo está jugando. Seguramente, los chilenos pensarán lo mismo, porque no ven a su Selección ganando, como estaban acostumbrados, metida entre los primeros para poder clasificar. Salvo los que están un poco más lejos abajo, todos todavía tienen opciones. Chile, matemáticamente, todavía tiene posibilidad.

-¿Qué recuerdos tiene de los enfrentamientos contra Chile por las Eliminatorias?
-Seguramente, porque yo estaba jugando en el fútbol como que tenían un valor distinto. Me tocó jugar contra la Selección chilena en Santiago y también en Asunción, en el Defensores (del Chaco). Bonitos recuerdos, porque estar en la selección para uno es lo máximo como jugador de fútbol profesional.

-¿Se hablaba harto en la cancha, había mucho roce? Usted se enfrentaba con los defensas con quienes también se topaba en la liga chilena.
-Sí, era una pelea semana a semana que teníamos allá, sobre todo cuando pasé por Audax y también en Católica. En varios equipos de los que jugué era un partido especial. Les gustaba hablar y a mí también me gustaba el roce y no achicarme. Son cosas que pasaron dentro de un campo de fútbol. Nos decíamos cosas o nos pegábamos y todo quedaba ahí. Eran partidos complicados con tremendos jugadores que tenía la Selección de Chile en ese momento.

-Hubo un recordado partido para Francia 98 en que usted entra, anota un gol y luego termina expulsado.
-Ah, sí, Marqué el gol y paso lo otro que dices. Seguramente, si seguía dentro del campo de juego por ahí les peligraba mucho y por eso vino la expulsión. Para mí, no correspondía la expulsión, pero son cosas que ya pasaron. Tuve la suerte de poder marcarle aun ex compañero y amigo mío como Nelson Tapia.

-¿Cómo es su vida hoy?
-Sigo en mi pueblo, estoy en Pilar. Y estamos ahora, justo cuando empezó la pandemia, armando con mis hermanos Eliecer y Braulio, que están allá en Chile, y un amigo también que se llama Michael Jiménez una representación de jugadores. Yo manejo acá todo lo que tiene que ver con Paraguay y ellos allá en Chile. La pandemia no retrasó todo para poder llevar los jugadores a Chile. En eso estoy.

-¿Y realiza otras actividades también?
-Sí, también tenemos agrupaciones de ex jugadores, que jugaban acá en mi ciudad, en Pilar. Hacemos partidos benéficos para gente que lo necesita por alguna enfermedad. Traemos jugadores de Asunción de la mutual de ex jugadores para realizar beneficios y compartir gratos momentos. En eso estamos.

-¿No deja mucho su pueblo? ¿Visita Asunción?
-Mira, ahora por la pandemia no hemos podido ir, pero antes íbamos con nuestro grupo de ex jugadores, que se llama ‘Senior Elite Pilar’. Vienen de allá y nosotros vamos para allá también para compartir. El presidente de la mutual de ex jugadores acá e s Rogelio Delgado, que en Chile es muy conocido también. Tendremos una actividad el 6 de noviembre y seguramente después habrá otras.

-¿Qué lo llevó a querer incursionar en la representación de jugadores?
-Siempre me gusto, siempre he ayudado a chicos de acá. He recomendado a muchachos a la capital Asunción. Siempre me gustó, pero ahora se armó algo más organizado. Yo desde acá de Paraguay y mis hermanos allá en Chile con el amigo Michael Jiménez. Estamos con todo para este fin de año y ya hemos hablado con algunos equipos de Chile para poder llevar algunos jugadores.

-¿Hay un nuevo Hugo Brizuela en Pilar que puede venir a Chile?
-Sí, todos tiene la posibilidad, depende del hombre que quiere jugar al fútbol. Hay jugadores, el paraguayo es un jugador aguerrido y hay en todas posiciones, arqueros, defensores, mediocampistas y delanteros. Siempre hay y ojalá que podamos llegar al mercado chileno. Estamos en eso y ojalá todo pueda salir bien, porque este año no se ha movido el tema en Chile por la pandemia.

-Usted tiene a sus hijos en Chile.
-Sí, mi hijo Darío Hugo acompaño a mi hermano Braulio cuando estuvo jugando en Puerto Montt, estuvo entrenando algún tiempo. Hoy está en Rancagua con su hermana Florencia Alejandra, más conocida como Flopi. Mis dos hermanos, Eliecer y Braulio, como te dije, también siguen en Chile. Eliecer también vive en Rancagua y me hermano menor, Braulio, se radicó en Melipilla.

-¿A través del sonido del teléfono se escucha el canto de muchas aves, es una vida plácida la que lleva en su pueblo?
-Sí, muy tranquila. Acá tenemos la planta de la mora, del coco, el mango. Se escucha todo el día el sonido de los pajaritos. Paraguay es muy vegetal, muy verdoso, hay muchos árboles. Tratamos de disfrutar la vida acá.