"Hemos sido el equipo más perjudicado": el desahogo de un experimentado DT nacional

El 2015, Palestino hizo historia en el fútbol femenino del país al derrotar a Colo Colo en la final del Clausura por 2-1. Esa victoria significó el primer título de la categoría para el cuadro árabe y el fin a un racha de 10 coronas seguidas por parte del Cacique. En la banca de las campeonas se encontraba Claudio Quintiliani (55), un entrenador que ha dejado huella en el balompié nacional.

- Quedaron eliminadas ante Santiago Morning en semifinales del Torneo Nacional, pero el marcador fue algo engañoso en cuanto a lo mostrado en cancha…
- La expectativa era llegar dentro de las cuatro primeras y lo logramos. Nos tocó un rival duro: Santiago Morning. El primer gol de ellas nace de una falta a favor nosotros en el área que la arbitra cobra al revés. Después estudiamos los errores que cometimos en el primer partido y hicimos algunos ajustes. La idea salió bien. Antes de los 12 minutos tuvimos dos oportunidades claras. Nos marcan el primero, nos toca un penal y lo fallamos. Luego hubo dos penales seguidos que la arbitra no quiso cobrar, no vio o lamentablemente estaba mal ubicada. Sus asistentes tampoco la ayudaron. Fueron dos claras manos que cometieron en ese partido. En ese partido creo que fuimos ser superiores y merecíamos ganar, pero no meter la pelota y por errores arbitrales perdimos.

- Todos los años le toca rearmar el plantel y remar desde atrás. ¿Cómo es competir contra las potencias de Santiago Morning, U. de Chile y Colo Colo?
- Palestino es un equipo que la pelea y tira gente para arriba, a la vitrina de los tres grandes. Lo tuve claro desde el inicio. Yo mismo se los digo a las jugadoras, que si les va bien en el año puede que agarren contrato en uno de los equipos grandes. Es difícil competir. Sabemos que tenemos que remar contra la corriente con un presupuesto bajo en comparación a los otros tres, pero generalmente somos el equipo que sale campeón del lado de los pobres. Nos sentimos orgullosos. No levantamos la copa, pero siempre llegamos a semifinales. Desde 2015 hemos estado en todas las semifinales, dos finales y fuimos campeonas. Palestino nos apoya harto, pero todavía no estamos a la altura de los equipos grandes, que pueden contratar extranjeras y tenerlas en departamentos como el ‘Chago’.

- Se le reconoce en el medio como alguien de carácter firme dentro de la cancha y se ha hecho una reputación en base a eso. ¿Cómo es fuera de la cancha?
- Yo tengo un personaje dirigiendo y este es muy diferente a como soy afuera. Dirigiendo quiero ganar la guerra y me comporto como un general. Ahí todo me tienen que hacer caso porque soy yo quien genera la idea del juego. Por lo tanto, las jugadoras o jugadores que jueguen en el equipo que estoy dirigiendo tienen que jugar de acuerdo con lo que planteo y eso está claro. Después, fuera de la cancha no tengo problemas y todos hacen la pega que tienen que hacer. Yo soy de estar más aislado y conversar poco con las jugadoras. Les mando videos por Whatsapp constantemente y les refresco la memoria. El apoyo. Si hay alguien que le falta dinero, está enferma o necesita zapatos, ahí estoy tratando de generar las 'lucas' para aportar. En la cancha es distinto y tienen que estar a mi pinta.

- Lleva seis años dirigiendo en Palestino, me imagino que debe haber vivido momentos en los cuales quiso marcharse o no estuvo tan satisfecho. ¿Cómo ha sido para usted todo este tiempo con el cuadro árabe?
- Generalmente me mantengo unos 10 años en las instituciones, después de eso me aburro y me voy. He renunciado una cantidad impresionante de veces porque me harta que no se haga lo que yo digo, y por lo tanto si no estoy cómodo me marcho. Cuando veo que jugadoras, jugadores o cuerpos técnicos no están a la par con mi experiencia, simplemente no quiero estar ahí. Ahora en Palestino estoy cómodo, pero me gustaría tener más. Estamos lejos de los tres equipos de punta. Me encantaría tener al menos la mitad del presupuesto que gastan ellos, que sería como 10 millones mensuales. Ellos gastan 20 millones o más mensuales. Para los otros equipos es muy difícil igualar las condiciones. Algunos equipos entrenan en la mañana y eso es una ventaja, porque pueden descansar, van a entrenar y después tienen otro descanso en la tarde. Acá no es así. Las chicas se levantan, van a trabajar, almuerzan apuradas, llegan 15 minutos antes del entrenamiento. Les sacó el jugo hasta las 20:00 y después tienen que llegar a su casa para preparar el otro día. No descansan bien.

- El 2015 le tocó salir campeón con Palestino, rompiendo la racha de Colo Colo y dándole el primer título femenino al cuadro árabe. ¿Qué recuerda de aquella campaña?
- Yo llegué el 2014 al séptimo partido. En ese momento Palestino tenía cuatro puntos en siete partidos y estaba penúltimo de la tabla. Ganamos cuatro partidos seguidos y al final quedamos sextos. Para el Clausura de 2014 nosotros la peleamos y llegamos hasta cuartos de final, perdiendo contra Colo Colo por 5-2. Llegó la apertura de 2015 y esta vez llegamos a semifinales, donde otra vez nos toca contra Colo Colo. Con un tremendo equipo, ellas nos empatan a dos y nos ganan a penales, donde la Christiane Endler nos atrapa dos penales. Ahí estábamos convencidos que teníamos un equipo fuerte. En el Clausura de 2015 le ganamos la final a Colo Colo por 2-1. Un año antes habíamos perdido 11-0 con ellas y después nos tocó ganarles. Lamentablemente, nos esteramos después que había una supercopa entre las campeonas del Apertura y Clausura para ir a la Copa Libertadores. Nos tocó jugar contra Colo Colo de nuevo, pero el desgate que habíamos hecho fue tremendo y al final terminamos perdiendo 3-1.

- Debe tener la espinita clavade de poder participar en una Copa Libertadores con Palestino…
- Siempre soñé con jugar una Copa Libertadores y me decía que un día la Conmebol iba a organizar una. En ese tiempo, en el año 2000, yo tenia a Santiago Morning y ganábamos todos los campeonatos. Del 2000 al 2005 los ganamos todo. Fuimos a Colombia y Perú en representación de Chile. Después me fui a Ferroviario, salí campeón dos veces y participamos en el primer torneo de la ANFP, donde llegamos terceros. Siempre soñé con participar en la Libertadores, pero no se pudo. Hace poco estuve cerca. Clasificaban dos equipos y habíamos llegado a la final, ganándole a Colo Colo. Luego inventaron un partido por el segundo cupo cuando nunca, en la historia del fútbol femenino, se había jugado un partido así. Ya hay varios antecedentes de que a Palestino lo ‘cocinan’.

- ¿Se siente perjudicado por la ANFP?
- Si, me siento 100% perjudicado. Palestino ha sido ell equipo más perjudicado en el fútbol femenino en muchos años, y eso nadie lo puede desconocer.

- Recientemente los dos equipos chilenos en Copa Libertadores se fueron eliminados. ¿Qué le pareció su participación?
- El problema es que Chile ya no tiene las mismas jugadoras competitivas. Everton llegó a la final con Christiane Endler, Carla Guerrero y Camila Sáez. El mismo triangulo lo tuvo la Selección Chilena para la Copa América y Colo Colo para ganar el campeonato. Lo más importante es la calidad de jugadoras. En esta copa hubo dos factores que influyeron: un campeonato a dos grupos donde nunca se enfrentó Santiago Morning con la Universidad de Chile, que recién lo harán ahora. Y nunca se enfrentó Palestino con Colo Colo. Es un campeonato malo porque un hubo mucha competencia. Los equipos llegan a la Copa Libertadores y no tienen la misma competencia. También, en la U se lesionaron dos jugadoras, la Carla Guerrero y Ramírez. Les habían ganado a todos los equipos con una estructura, pero ahora no la tuvieron, ahí la U pasó a ser un equipo común y corriente. Con el ‘Chago’, considero, de forma respuesta, que la entrenadora no conoce la forma de jugar en Sudamérica.

- ¿Quién cree que ganará la final entre la U y Santiago Morning?
- Antes del campeonato apostaba fijo por la Universidad de Chile. Después, que no estaba la Carla Guerrero y Ramírez, apostaba por Santiago Morning. Ahora que apareció Ramírez, y solo se modificará una jugadora, el partido está muy parejo y no hay favoritas.