“Quería ponerme un objetivo muy desafiante... Mi papá y mi hermano lo hacen, quería saber qué se sentía”

Los últimos dos meses fueron muy emotivos para Catalina Salazar. La triatleta chilena anunció hace unos días que se casará con el también deportista Martín Paquay, y en mayo pasado, vivió su primer Maratón de Santiago, donde pudo terminar los 42 kilómetros.

En la segunda parte de su conversación con AS Chile, la atleta nacional describe las dificultades que vivió ese 18 de mayo.

- ¿Cómo fue la experiencia del Maratón de Santiago?

- Quería ponerme un objetivo muy desafiante. Mi papá y mi hermano lo hacen, son maratonistas, entonces quería saber qué se sentía. Me habían ofrecido correr en otros países, pero quería sentir el apoyo de los chilenos.

- ¿De qué forma lo preparó?

- Empezamos en febrero con mi entrenadora de una forma progresiva en los volúmenes. Me había sentido muy bien, con los ritmos muy cómoda donde Martín me acompañaba. Él se preocupaba mucho de mi recuperación. Dentro de la preparación, tuve una recaída en una lesión de la banda iliotibial, pero fui al kinesiólogo y los dolores pasaron, pero volvieron el día de la carrera.

- ¿Cómo así?

- En kilómetro cinco me empezó a doler la banda, no lo podía creer. Pensé en que era algo psicológico para aguantar, pero en el kilómetro 15 me empezó a doler más y en el kilómetro 28 ya era insoportable. Me empecé a echar cloruro de etilo para congelarme la rodilla, pero no había caso. En el kilómetro 33 estaba llorando del dolor, así que decidí retirarme.

- ¿No pudo terminar la carrera entonces?

- Me fui caminando hacia la casa de mi pololo, pero me empezaron a llamar mis familiares y me dijeron que tenía que terminar como sea (ríe). Volví, pero lo hice con la rodilla estirada, cojeando, porque si la doblaba, era insoportable el dolor. Sin embargo, lo pude cumplir, no en el tiempo que quería, pero crucé la meta.

- ¿Qué sigue en su carrera para el segundo semestre?

- Estoy inscrita en dos carreras en agosto, pero no sé si correré la primera porque quiero estar al cien por ciento. En octubre me inscribí para el Maratón de Viña y después el Triatlón de Valdivia.

- ¿Y le gustaría correr un maratón en el extranjero?

- ¡Sí! Mi papá quiere que lo haga, pero antes quiero hacer un buen tiempo en Viña. Mi objetivo para el próximo año es correr afuera y también motivar a Martín para que viajemos juntos por una competencia.