ENTREVISTA AS
Las horas más locas del último chileno que llegó a Brasil: “Iba a trabajar en una tienda deportiva”
“Lo que me dijo mi pareja fue que jugar en Brasil era mi sueño desde niño, que tenía que seguirlo, porque ella estaría ahí apoyándome”.

En la primera parte de su entrevista con AS Chile, Óscar Aravena (23) habló sobre sus primeros días en Brasil, donde a partir de esta semana jugará en el Potiguar de Mossoró. Ahora, el volante chileno se refiere a los increíbles días que vivió antes de que llegara esa propuesta.
“Sólo había venido de vacaciones a Brasil y ahora estoy jugando acá; era el sueño de mi vida”
Tras su paso por Constitución Unido en el fútbol amateur chileno, Aravena pensó en opciones para generar más ingresos económicos. Es por eso, que empezó a postular a trabajos y hubo uno en particular al que estuvo muy cerca de llegar.
- Cuando estaba en Chile, ¿cómo se sustentaba económicamente? ¿Tenía que trabajar en paralelo al fútbol?
- En Constitución me daban todas las comidas del día, la pensión y aparte el sueldo, entonces todo lo que ganaba iba para mis cosas, pero sí pensé en trabajar en otra cosa en un momento, porque uno aspira a más cosas también. Estuve cerca, llegué hasta buscar las entrevistas. Iba a trabajar en una tienda deportiva como vendedor, pero fue justo dos días antes de la propuesta de Brasil y no fui a la entrevista. Obviamente mi foco principal siempre ha sido el fútbol e iba a seguir entrenando, porque había terminado mi vínculo en Constitución, no recibía ningún dinero.
- ¿Y ahora mejoró su situación?
- Sí. No voy a mencionar clubes, pero en Chile se habían acercado clubes de Segunda y Tercera a preguntar por mí, pero yo ya había decidido de venir a Brasil. Sé que si me va bien, puedo seguir acá o si es que vuelvo a Chile, lo haría con más nombre por decirlo de alguna forma.
- ¿Cómo fue el momento en el que le contó a su familia de este paso?
- Yo vivo con mi pareja y la familia de ella, y le conté a ella de esta propuesta. Costó un poquito porque uno también se acostumbra a estar en la casa, a esa rutina de estar con ellos, pero lo que me dijo ella fue que era mi sueño desde niño, que tenía que seguirlo y estaría ahí apoyándome.