1x1 Chile: Osorio reaccionó y Echeverría fue vital en una derrota dolorosa
Ambos volantes tuvieron un rol clave en el segundo tiempo, levantando el nivel de juego de Chile antes que Argentina anotará cerca del epílogo.
Claudio Bravo: Seguro en el juego con los pies y con buena precisión en las habilitaciones largas cuando Chile se complicó en las salidas. Impidió dos veces el gol de Argentina tras el descanso, con atajadas rápidas y ágiles.
Mauricio Isla: Le costó entrar en la dinámica del partido al comienzo, interviniendo poco y con dificultades en el control defensivo de su sector. Pasó al ataque en el segundo tiempo y participó en una gran llegada en ofensiva, enviando un centro. Cumplió.
Igor Lichnovsky: Fue uno de los mejores en el primer tiempo. Firme y ágil para interrumpir constantemente el accionar de los argentinos. También se atrevió con el balón en los pies y resolvió con claridad. No bajó en su desempeño posteriormente, siguió firme en el centro de la defensa. Entregó seguridad.
Paulo Díaz: Al comienzo no fue regularmente exigido, pero cuando tuvo que participar mostró jerarquía, con éxito en los duelos, adecuados pases de salida y venciendo en el juego aéreo. Presencia, peso y estatura de juego en el centro de la defensa.
Gabriel Suazo: Muy activo en la fracción inicial. Le llegó constantemente el balón y, en la mayoría de las ocasiones, volvió a habilitar son seguridad. Se animó también a desdoblarse en ataque. Mantuvo la misma línea individual de juego en el segundo tiempo.
Erick Pulgar: Fue de menos más, partiendo algo desconectado del trámite del partido y llegando a destiempo en ocasiones. Al cierre del primer tiempo, resolvió mejor con el balón y realizó cortes de juego rival y recuperaciones de balón. Gravitó como volante central, y en la medida de lo esperado, se notó su presencia en la cancha. Lo reemplazó Marcelino Núñez, a los 76 minutos.
Rodrigo Echeverría: Activo, dinámico y con la intensidad que requería el desarrollo del partido cuando Argentina atacó. Fue sobre Messi en los descensos para entrar en juego del capitán trasandino y lo mantuvo controlado. No decayó y mantuvo la huella de su juego posteriormente. Pudo anotar el 1-0 para Chile en la primera acción de ataque con riesgo. Después, y con otro tiro, también estuvo cerca de convertir.
Darío Osorio: Le costó entrar en acción en la primer parte. Se le vio alejado por la derecha, observando todo lo que pasaba. Intentó cambiar el panorama, pero tampoco logró conectarse mediante asociaciones. Adquirió más confianza posteriormente con buenas acciones con el balón. Fue el mejor de la Roja en la segunda fracción.
Alexis Sánchez: No fue el auxilio esperado en las salidas, cuando Chile pudo recuperar el balón y fue habilitado en ofensiva. No pudo girar con el balón y siempre perdió en las disputas. Intervino muy poco durante el complemento y fue la primera sustitución al salir por Marcos Bolados.
Víctor Dávila: De entrada recibió un golpe en el rostro del que le costó reponerse. Como Chile no tuvo el balón, su aporte se concentró en la fase defensiva, llegando incluso hasta la línea de meta en los retrocesos. Terminó jugando de segundo centrodelantero y se vio agotado.
Eduardo Vargas: Intentó entrar en acción con desmarcaciones y descensos, pero no tuvo incidencia. Le costó accionar con el balón para entregar la progresión que se esperaba para salir desde la zona defensiva. Sacrificado, siempre echó una mano corriendo hacia atrás cuando Argentina intensificó el control del juego.
Sustitutos
Marcos Bolados: A los 65 minutos, ingresó por Alexis Sánchez. Corrió y se prodigó como volante izquierdo.
Marcelino Núñez: entró por Pulgar. Intentó jugar con el balón y estuvo activo también en las acciones de presión.
Nicolás Fernández: Ingresó por Isla en los minutos finales. Fue su debut absoluto en la Roja.
Ben Brereton: Reemplazó a Vargas. No tuvo la opción de tocar el balón.