Dos cabezazos mantienen viva la última ilusión de la UC

La UC festejó en la Copa Chile. En la ida de los octavos de final, la escuadra de Ariel Holan se impuso como visita ante Audax Italiano (2-0). El certamen es el premio de consuelo para los cruzados, quienes ya se despidieron de las copas internacionales y olvidaron la opción de ser pentacampeones en el Torneo Nacional.

El primer tiempo no fue un gran espectáculo y, para colmo, las luces volvieron a ser protagonistas. Como en el Colo Colo-Palestino, o en el Ñublense-Unión Española, el fútbol quedó a oscuras en La Florida. Lo más insólito fue que sucedió cuando solo transcurrían 17 segundos.

Al final, luego de 20 minutos, la acción regresó, y a los 10′ llegó la primera acción de peligro, con Montes y Zampedri como aspirantes al gol. Sin embargo, ninguno de los dos pudo empujar el balón en el área chica tras un centro de Fuenzalida.

Luego, al minuto 21, los cruzados sumaron otra aproximación al arco audino. No obstante, les volvió a faltar fineza, y Montes lo demostró con un tímido cabezazo.

A partir de eso, el fútbol decayó. Audax tampoco propuso algo diferente, y lo que se apreció fue lento, trabado, ideal para una siesta.

Recién sobre los 45′ hubo una sorpresa. Y fue el golpe más certero de la UC: Parot condujo por la izquierda, envió un centro perfecto y Ampuero irrumpió en el área para anotar de cabeza. Así, la visita se iba a descansar en ventaja.

En el complemento, el nivel del juego tampoco fue tan llamativo, pero sí hubo más opciones en las áreas. La Católica, por su parte, pudo aumentar por medio de Fuenzalida y Tapia. Sin embargo, el primero erró un mano a mano y el segundo no pudo cambiar por gol una gran asistencia de Isla.

Audax, en tanto, metió miedo en el último cuarto de hora. Fabián Torres exigió de cabeza a Pérez, Alvarado mandó el balón al travesaño luego de una tijera y el joven Aedo rozó el poste con un tiro de distancia.

De todos modos, esa presión del local no fue suficiente. Al final, un balón detenido le dio el segundo a la UC, que aumentó con otro cabezazo, esta vez de Zampedri.

La vuelta se disputará el próximo sábado a las 18.30 horas en San Carlos de Apoquindo y marcará el cierre del feudo cruzado para su remodelación.