El detalle que ilusiona al rival de la U: “Podemos sacar una mínima ventaja”

Este domingo a las 15 horas, Deportes Copiapó recibirá a la U en una ‘final’ para sus aspiraciones de escapar a la zona baja de la tabla. Para eso, es que luego del empate contra Colo Colo, en el cuadro nortino han trabajado arduamente para preparar el duelo ante el cuadro de Mauricio Pellegrino, que lleva siete fechas sin ganar.

Juan Jaime estará presente en el ‘León de Atacama’. Uno de los referentes del cuadro copiapino analiza en AS Chile el duelo contra los azules y se refiere a un tema muy comentado en la previa: el césped sintético del estadio Luis Valenzuela Hermosilla y el calor que se espera para la hora del partido.

- ¿Cuánto les puede favorecer quizás a ustedes las condiciones climáticas y la cancha sintética, teniendo en cuenta que ustedes las conocen más y que la U no está acostumbrado a esto?

- Sí, para los dos ese va a ser un horario complicado, porque para nosotros, más allá de que nosotros entrenemos todos los días, también nos afecta el calor, la cancha. Sabemos que por ahí sacamos una mínima ventaja donde nosotros conocemos el césped, entrenamos casi todos los días, jugamos acá, pero el calor va a ser para los dos iguales. Nosotros sabemos que ganando este partido nos va a dar ese impulso anímico que estamos buscando. Lo venimos haciendo bien, de menos a más, y ojalá que el día domingo podamos coronarlo, para que nos despeguemos de la parte del fondo.

“Teníamos una marcha menos...”

- Usted fue el jugador con más recuperaciones de la categoría en la primera rueda. Teniendo en cuenta que estuvo muchos años sin jugar en la máxima categoría, ¿cómo fue su adaptación?

- Estoy contento. Desde que llegué a Chile siempre soñé que podía estar en la Primera División. Si bien Copiapó me abrió las puertas y era un club de segunda, me costó. Sabía que los primeros partidos me iba a costar, pero tenía confianza en mí de que podía adaptarme rápidamente a la categoría. Sigo creciendo a medida de que van pasando los encuentros y estoy contento de que puedo seguir jugando. Siento que estoy preparado. Ojalá que terminemos el año de buena manera, en Primera División y después, lo del año que viene se verá.

- ¿Qué fue lo que más le costó en ese salto a Primera?

- Creo que la intensidad. En la B creo que se juega con una marcha menos. Se corre más, pero se juega a un ritmo menor. En Primera es distinto y creo que por ahí fue la falencia que tuvimos nosotros. No tuvimos una buena pretemporada, fue muy encima, no tuvimos amistosos y veníamos con esa marcha menos que con el paso de los partidos fuimos mejorando. Tomamos ritmo y tuvimos ese envión en el que levantamos un poco. El ‘profe’ Ivo también cambió los entrenamientos, creo que él también está bastante capacitado en esta categoría y nos está dando las herramientas que él tiene y nosotros estamos acatando bien lo que él quiere. Gracias a Dios estamos saliendo del fondo.

La sufrida lucha para no descender

- ¿Se mira de reojo lo que van haciendo los rivales directos suyos o es sumarse presión?

- Está claro que dependemos de nosotros. Si venimos haciendo las cosas bien, con ese impulso anímico y futbolístico, tenemos que enfocarnos en lo que nos corresponde a nosotros. Creo que tenemos un plantel con muy buenas individualidades, lo hemos hecho bien por momentos y en otros hemos quedado expuestos, pero si nos concentramos, en lo que nosotros verdaderamente tenemos que hacer, seguramente lo vamos a dejar a Deportes Copiapó en Primera División.

- ¿Cuáles son los factores que los llevaron a perder tantos puntos?

- Yo creo que no ser precavido. Creo que nos faltaba inteligencia para leer los partidos. En la seguidilla de partidos perdidos, queríamos salir rápido de ahí, entonces íbamos a buscar medio ciegos y de contra nos terminaban anotando. En esa búsqueda de querer empatar, querer ganar, sufríamos. Después de agarrar ritmo empezamos a sumar, pero lamentablemente se fue el DT (Héctor Almandoz) y hoy tenemos otro DT que nos está también reestructurando y venimos bien.

- ¿De qué forma valora la remontada que están logrando en la tabla?

- Durante toda la temporada hemos estado en la parte baja y sabemos que va a ser así hasta fin de temporada, entonces no nos podemos descuidar. La parte baja está demasiado pegada, un triunfo te despega un poquito, pero tampoco te hace estar tan tranquilo. Estos empates nos han servido para agarrar confianza y seguridad. Lo importante es rescatar los tres puntos en casa, para que los empates de visita sirvan. El fin de semana tenemos una prueba de fuego.

- ¿Cómo manejaba la frustración en los momentos donde sentía que el equipo merecía más puntos pero no los conseguía?

- Te daba un poco de rabia porque sabíamos lo que teníamos. Por un momento fuimos el equipo con más tiros al arco y después éramos el más goleado, entonces era como medio raro. Estábamos ahí medio apenados porque sabíamos que generábamos, pero no concretábamos. Pero a medida que pasaron los partidos nos fuimos acoplando a la categoría. Hoy por hoy estamos bien, creo que tendríamos que tener muchos más puntos, pero también sabemos que es lo que nos toca vivir y hay que al final levantar la cabeza, inflar el pecho y seguir peleando hasta el final. Tengo plena seguridad en este equipo. El fútbol es de momentos, un día estamos arriba y al otro estamos abajo y al final hay que convivir con la frustración. Nosotros nos preparamos para combatir. El ascenso del año pasado fue hermoso, algo histórico para el club pero hoy estamos en otra etapa, estamos en Primera División donde hemos anhelado tanto estar y tenemos que ir por otras metas.

- ¿Cuáles?

- Hoy nos toca pelear la parte de abajo pero la meta de nosotros es dejar a Copiapó en Primera y seguir creciendo. Creo que el club tiene muchísimas cosas para crecer, para mejorar y para conseguir. Es un club que está en crecimiento constante y ojalá que en el corto tiempo podamos clasificar alguna copa. Vamos de menos a más.

- ¿Logra abstraerse de los malos momentos del fútbol en su vida personal?

- Si en algún momento la cosa no fue como uno la planificó, seguramente en el momento me calentaré, me dará pena, pero al otro día analizaré los errores, trataré de ver qué es lo que fallamos y mejorar desde ahí. El apenarse, el llevar las tristezas a la casa no sirve de nada. A mí me encanta el fútbol, yo en mis tiempos libres veo fútbol, estoy con mi familia, trato de hacer algo por ahí en un corto tiempo, algún asado con mis amigos, compartir algo pero generalmente estoy abocado a lo que es el fútbol. En ningún momento me desagrada estar pendiente.