El ingrato retorno de Campos
El portero volvió a defender el arco de Universidad de Chile, pero no pudo ayudar a que su equipo sacara ventaja en la parte baja de la tabla.
Cristóbal Campos acaba de participar de la gira europea de la Roja, en donde no vio minutos contra Marruecos y Qatar, pero que sirvió para que Eduardo Berizzo y el preparador de porteros Roberto Bonano lo siguieran evaluando.
De vuelta en el país, el arquero de Universidad de Chile se puso a las órdenes de Sebastián Miranda y recuperó su puesto en el arco azul. El desafío era Audax Italiano, en un partido importante donde podrían haber marcado una diferencia respetable con el 14° y 15° de la tabla.
Sin embargo, la U cayó y varios señalaron a Campos. Algunos como culpable de la derrota y otros simplemente por bajo nivel. Pese a que el portero tuvo un par de lecturas muy bien resueltas fuera del área y dos intervenciones importantes (en un cabezazo y un tiro dentro del área), no se le perdonan los hierros.
El ‘25′ de los azules tuvo total responsabilidad en el 0-1 de Audax, un remate de distancia de Matías Sepúlveda que iba rasante, no tan potente y que da la sensación se confió, dejándola pasar, para luego ver cómo daba en el palo e ingresaba.
Hacia el final del partido, con el marcador 2-2, una salida apresurada terminó con un choque entre él y Michael Fuentes. El árbitro Angelo Hermosilla consultó con el VAR y cobró penal, en una jugada muy discutible, donde si bien Campos manotea el balón, también impacta al delantero.
“Asumo mi responsabilidad en el resultado este partido, pero hay que tener un carácter suficiente para salir de esta situación”, dijo el meta tras el encuentro.
Así, muchos sindican al portero universitario como responsable de dos de los tres goles del conjunto itálico, aunque también es cierto que tuvo intervenciones en donde evitó goles de la visita.