El jugador de Colo Colo que deslumbra al continente
Gabriel Suazo confirmó su gran momento y fue uno de los albos que llamó la atención ante River Plate. Su mejoría casi nadie la discute y sorprendió también a los argentinos.
En un partido de equipos parejos, finalmente Colo Colo terminó cayendo por 2-1 ante River Plate en el cierre de la primera ronda del Grupo F de la Libertadores. Los albos flaquearon en los momentos finales y la visita en el Monumental marcó las cifras. Gabriel Suazo, capitán del Cacique, fue uno de los mejores hombres de la cancha, sumando un nuevo episodio en la expansión de su juego. De hecho, la información tras el duelo fue que al DT millonario Marcelo Gallardo le llamó la atención el nivel del colocolino.
El lateral izquierdo cumple un rol clave en la escuadra dirigida por Gustavo Quinteros. El panorama del zurdo es una extensión de lo que realizó en 2021, pero sus incursiones primero en la Roja, durante las Eliminatorias, y ahora en la Libertadores no pasan inadvertidas en Sudamérica. El rasgo sustancial de la actualidad de Suazo ha sido la evolución constante, hoy es otro jugador y la marca de su juego exhibe nítidos sellos de identidad.
Salida y ataque
El colocolino avanzó notablemente en los requerimientos ofensivos de su rol en la cancha. Dejó atrás las dudas de temporadas anteriores y actualmente su influencia resulta determinante en la construcción de juego y también durante la organización del ataque.
Regularmente, Colo Colo inicia el juego desde su portería con salidas con el balón a ras de piso, buscando unir la línea defensiva y el mediocampo a través de asociaciones que impliquen progresión. En este propósito, Suazo es un apoyo permanente, no se oculta y siempre está disponible para ser un destino de las habilitaciones. Ante River Plate, no fue la excepción, sobre todo en el segundo tiempo con algunas maniobras sorteó la presión de los argentinos y permitió el avance del equipo por su sector.
El zurdo posee habilidad para maniobrar en espacios reducidos y contra la línea lateral del terreno de juego. Driblea naturalmente, en ocasiones amaga ir hacia el centro y vuelve hacia el costado con giros y cambios de dirección abruptos, inesperados, que le vuelven a entregar margen de acción para el progreso vertical. Esto es fundamental en la estructura colectiva del Cacique, pues le brinda continuidad y avance a la circulación del balón.
Durante la fase de finalización, el aporte del capitán albo no disminuye, sobre todo en la competencia local. A diferencia de Óscar Opazo, lateral derecho de Colo Colo, quien profundiza en su sector con apariciones para recibir el balón, Suazo progresa y trasciende mediante maniobras de juego asociado. Su fuerte es la interacción con los apoyos cercanos, superando líneas de presión, para quedar en condiciones de habilitar o finalizar la maniobra colectiva. Bajo este formato, en ocasiones llega a ser hasta un cuarto atacante, como ocurrió en el partido contra Alianza Lima en la Libertadores.
Por mejorar
El avance del zurdo ha sido integral. También en la faceta defensiva, pero durante la máxima exigencia competitiva, en momentos puntuales, deja la sensación de que debe enfatizar ciertos comportamientos relativos a la protección de la portería de su equipo.
Posicionalmente, no experimenta grandes dificultades. Sus acciones de cierre para evitar perder la espalda o en los envíos desde el lado contrario de la defensa son eficientes, y regularmente se encuentra bien ubicado. Además, frente al juego combinativo rival, no pierde la marca, sigue el receptor del pase final y pocas veces es sorprendido. No siempre sustrae el balón o interrumpe el juego, pero sigue siendo un obstáculo en la ruta directa y libre hacia el arco colocolino.
En este plano, un tema pendiente es el control defensivo ante oponentes de gran velocidad o contextura mayor. Lo vivió principalmente en la Roja durante las Eliminatorias y cuando el conjunto nacional debió focalizar su accionar solo en defender. Tuvo dificultades contra Brasil, en el Maracaná, frente al rápido y hábil Antony.