El profundo análisis del ‘Rambo’ Ramírez: pide respeto en el fútbol chileno y apunta a Cagigao

Luego de conseguir su primer triunfo como DT de Deportes Limache, Marcelo Ramírez (57) habló con AS (pincha aquí para leer). El ‘Rambo’ abordó su presente en el club tomatero y enfrentó una llamativa interrogante: ¿Está entre sus objetivos llegar en algún momento al banco de Colo Colo? “Solo el tiempo lo dirá”, respondió el ex meta, quien en Macul consiguió 15 coronas. Una de ellas fue la Copa Libertadores de 1991.

De todos modos, Ramírez también habló de otros temas en la entrevista. Es la segunda parte que ahora te presentamos: un profundo análisis del fútbol nacional, la visión sobre la portería de Chile y una crítica a Francis Cagigao. “Yo no entiendo por qué está como amo y señor de la Selección”, lanzó el ex jugador de la Roja.

- ¿Cómo cree que el medio ve al entrenador chileno?

- O sea, es cosa de ver las campañas en Primera, los equipos que van arriba. Ñublense, Curicó, Cobresal, que son clubes dirigidos por chilenos. Yo saco un poco a Colo Colo, la U y Católica, porque, como decía otro amigo, el ‘Cabezón’ Espina, uno en esos equipos ‘corre con el caballo del comisario’.

- ¿A qué se refiere?

- Que tienes ventajas sobre los demás por temas económicos, de infraestructura. No estoy diciendo que sea fácil ni mucho menos, pero tienes una ventaja. Los entrenadores que están en Ñublense, Curicó, la tienen que remar más. Es más difícil, ya que tienen menos recursos. Sin embargo, compiten y están peleando palmo a palmo. También Unión Española. En Primera B ni hablar, y en mi categoría, la Segunda, también. Nunca he estado en contra de los jugadores y entrenadores extranjeros. Pero hay que ser aporte. Tanto a nivel de jugadores, para que no vengan a tapar a los jóvenes que están emergiendo, como a nivel de entrenadores... Hay equipos que traen técnicos a hacer sus primeras armas y no conocen el medio.

- Como pasa en Unión La Calera.

- Claro. Y a los dos meses los sacan y traen a otro. Entonces, con eso no estoy de acuerdo. Si viene un Bielsa, un Sampaoli, gente con nombre, que realmente haga crecer a los entrenadores, a los futbolistas chilenos, son todos bienvenidos... Si con lo que uno no está de acuerdo es con este casi de conejillo de indias en algunos clubes. Traen y traen técnicos, y si les resulta, bien. Y si no, los echan. Y a los técnicos chilenos, que realmente llevan años trabajando de manera seria, ordenada, haciendo buenas campañas en equipos con menos recursos, cuesta que los valoren. Para cerrar la idea, no tengo nada contra la gente que viene de afuera a trabajar, pero que sean un aporte. No que vengan a ensayar. Para eso que lo hagan en otro lugar, no acá.

- ¿Y qué ocurre en la Selección? Hace varios años que solo hay entrenadores extranjeros. El último chileno fue Juvenal Olmos. ¿Por qué cree que siempre se mira para afuera y no lo que hay en casa?

- Porque los tipos que toman las decisiones no sé por qué las toman (ríe). Por ejemplo, yo no entiendo que (Francis) Cagigao esté en esta posición, de casi como amo y señor de nuestra Selección, haciendo una nómina antes de que llegue el técnico (Eduardo Berizzo), casi dando cátedra. Esas cosas me cuestan mucho entenderlas. En Chile hay gente capacitada y preparada. Lo que pasa es que les cuesta creer en lo nuestro. Nos cuesta querernos y valorarnos realmente. Entonces, yo creo que técnicos chilenos hay.

- ¿A quién nombraría?

- O sea, no veo por qué a un técnico como Gustavo Huerta, de conocimiento, trayectoria, experiencia, y que ya estuvo en un Mundial, trabajando con Nelson Acosta, no le podría ir bien en la Selección. ¿Por qué traer otros técnicos en vez de apostar a eso? Es un tema de creer, de querer, de valorar lo nuestro. Desde que tengo uso de conocimiento, ha sido una lucha.

- ¿De qué otro entrenador se acuerda en estos momentos?

- (No entiendo cómo) Miguel Ramírez todavía no ha llegado a Colo Colo con todas las campañas que ha hecho. Un Mario Salas, que en su momento hizo una buena campaña en Colo Colo, y ahora está haciendo lo mismo en Huachipato... ¿Por qué no puede estar en la Selección? Tiene un conocimiento acabado del medio. Creo que pasa por la gente que toma las decisiones. De repente no son las más acertadas.

- ¿Y Berizzo le convence para la Roja?

- Puede ser una buena alternativa. Conoce el medio, trabajó en Chile, fue exitoso en los equipos en que trabajó. También estuvo en una etapa exitosa junto a Bielsa, así que tiene todas las posibilidades para que le vaya bien. Es un técnico que ya ha trabajado a nivel de selección. En este caso puntual, me parece una buena opción. Pero yo insisto con los técnicos con experiencia que hay en Chile. No veo por qué a un Gustavo Huerta le podría ir mal en la Selección, un tipo que tiene tanta experiencia, tanto conocimiento del medio, de los jugadores, que año tras año hace muy buenas campañas en sus equipos. Pero bueno, es así.

- A propósito de su pasado en Colo Colo. ¿Qué le parece el nivel de Brayan Cortés y Omar Carabalí?

- Brayan ya está en un primer nivel. Alcanzó un rendimiento óptimo como arquero de equipo grande, de Selección, exportable, así que es una lástima lo que le sucedió (la lesión). Afortunadamente, debería estar pronto en la cancha y sin ningún tipo de secuelas, así que le deseo la mejor recuperación. Y Omar Carabalí, a quien conozco, porque trabajamos juntos en Colo Colo, es un arquero de mucha proyección. Salió a préstamo e hizo sus primeras armas en San Luis de Quillota. Yo tengo mucha confianza en esos arqueros. Brayan, ni hablar. Ya está hecho. Para Omar, estas son las pruebas de fuego y va a tener que asumir un rol protagónico en momentos que el equipo lo necesita. Estas son las oportunidades que hay que aprovechar.

- ¿Y qué opina de la terna que escogió la Selección para la gira asiática? Sebastián Pérez, Zacarías López y Fernando de Paul.

- Es que te juro que no sé quién hizo la lista. No entiendo por qué ese apresuramiento, si el técnico llegó a los pocos días. Entonces, nada... Para mí, sin dudas, los arqueros son Bravo, Cortés y los demás la están peleando. ‘Zanahoria’ (Pérez), ‘Nacho’ González, el de Audax (Joaquín Muñoz), (Zacarías) López, que son muy buenos arqueros. Pero hay que arrancar que los indiscutibles, los inamovibles. Entonces, por eso te digo que es poco serio. No sé qué buscaron con esto, de hacer la nómina de la Selección sin el técnico. Si el entrenador ya está. ¿Y qué hace ahora con esta nómina? ¿La tiene que respaldar o hace una nueva? Lo ideal sería que él hubiese elegido a todos los jugadores, en base a lo que él quiere como modelo de juego. Estas cosas son las que me cuestan mucho entender y descifrar.

- O sea, es una señal errónea iniciar el ciclo sin Claudio Bravo, ¿no?

- Por eso te digo que es poco serio cuando (la nómina) no la hace el técnico. Salvo que Berizzo, que es lo más probable, le diga a Claudio ‘yo no necesito verte, porque sé lo que rindes, lo que eres y estás en una de las competencias más importantes de este planeta, que es la Liga española, en un gran equipo. Acabas de renovar por dos años y no te voy a llevar a esta gira porque quiero ver a otros arqueros’. ¿Me entiendes? Si es consensuado así, se puede entender. Lo normal y lo que uno espera es que Berizzo llame a Claudio y le explique ‘no te voy a llamar por esto, pero tú eres el arquero de la Selección o yo cuento contigo para las Eliminatorias’.

- ¿Es un lujo no contar con Bravo?

- Claro. Un lujo que no sé si nos podemos dar. No contar con un arquero de trayectoria, que a su edad sigue plenamente vigente, sería absurdo. No creo que eso pase, de verdad, porque Berizzo es un tipo inteligente y sabrá tomar las decisiones correspondientes frente a eso. Pero por eso te digo: no me cuadra esto de que hayan hecho la nómina días antes de que llegue el técnico. ¿A los cuántos días llegó Berizzo desde que se hizo la nómina?

- A los tres días.

- Es absurdo. ¿Qué costaba esperar que llegará Berizzo? Está bien, a lo mejor no tiene el conocimiento acabado de lo que son los jugadores de proyección, pero bueno... Eso lo conversará. Él debe consensuar una nómina, pero no esto de que llegue y tenga que irse de gira con jugadores que él no eligió. Es muy raro. No entiendo eso.

- ¿Ha conversado con Bravo en el último tiempo?

- No. La última vez fue cuando él estaba en el Manchester City. Una vez que tuvo un problema acá, que también lo habían cuestionado por algo y hablamos. Hay una muy buena relación con él y le tengo mucho cariño, aparte del respeto y admiración que siento por él como arquero. Y también fuimos compañeros: yo estaba en mis últimos años y él iba a entrenar con nosotros en Colo Colo como tercer o cuarto arquero, y después me tocó dirigirlo en el club antes de que se fuera a España.

- Entonces, lo conoce bien...

- Sé cómo se parte el lomo para estar en la Selección, para mantener el rendimiento que ha tenido durante toda su carrera... Estar en el Betis, uno de los equipos de primera línea de España, una de las mejores ligas del mundo, a esa edad, no es fácil. Eso no te lo regala nadie. Eso significa mucho esfuerzo, mucho sacrificio, mucha dedicación, mucho cuidado. Tengo respeto por un tipo que ha dado mucho, pero que puede seguir dando. Si tú me dijeras ‘está atajando en la Segunda División de Hong Kong’, te la doy. Pero está en el Betis de Pellegrini y le acaban de renovar por dos años. Entonces, ¿de qué estamos hablando? Es volver a lo del comienzo: puta que nos cuesta querernos, valorarnos... Un arquero de primerísimo nivel, que ha estado en el Barcelona, en el City. Lo cuestionamos acá y al tipo lo acaban de renovar por dos años en un equipo de primer orden en Europa. Por eso te digo: desde esa base, yo creo que Berizzo cuenta con él y la Selección parte en el arco, por lo menos para mí, con Bravo y Cortés. Para el tercer puesto hay cuatro o cinco que la pueden pelear.

- Agarrándome de lo que usted decía, de que nos cuesta valorar a los referentes, a los ídolos. ¿Por qué cree que pasa aquello?

- Te juro que no lo sé. Es una pregunta que siempre me he hecho, porque me ha tocado estar con los grandes ídolos de este país. Sin embargo, en algún momento de sus carreras, han sido denostados y poco valorados. Es muy raro... Algunos hinchas podrán estar de acuerdo o no con la vida privada del jugador, pero ahí uno hace lo que quiere. Pero lo que han sido estos animales dentro de la cancha... Un Vidal, un Sánchez, un Bravo, un Zamorano, un Salas. Son tipos que merecen la admiración y el respeto para siempre, por todo lo que entregaron. Llevaron el nombre de nuestro país por el mundo. Entonces, te juro que no sé cuál es la respuesta. Igual, cuando las cosas van bien, el hincha es un tipo que te muestra cariño, respeto. Uno tampoco puede generalizar. Pero también hay otro grupo de hinchas, que tampoco es menor, que no es así. Cuesta entender.

- Está para hacer una tesis.

- Sí, claro, porque mucha gente coincide en eso. Y no solo en fútbol. Hay artistas, escritores, actores... En toda índole, a la gente que tiene una notoriedad, una connotación mayor, que ha sido querida y respetada en el mundo entero, nos cuesta muchísimo valorarla. Muchas veces son más reconocidos, valorados y respetados fuera de nuestro país. No sé por qué pasa eso.

- O bien, los homenajes comienzan cuando las personas mueren. La idea es valorar en vida.

- El respeto tú lo muestras siempre. En mi caso, si me topo a Elías Figueroa, que fue uno de mis grandes ídolos, me provoca una sensación de respeto, de admiración. Yo crecí viéndolo. Fui partícipe de su despedida en Brasil y supe lo que generaba en ese país, una de las cunas de los jugadores más importantes de este planeta. No sé, yo no podría decirle ‘Elías’. Para mí, es ‘don Elías’ y se va a morir así. Me provoca una admiración enorme por lo que fue, por lo que significó. Como decía la canción de Maradona, ‘regó de gloria’ esta tierra donde jugó. En Uruguay, en los Mundiales, en Brasil. Genio, figura, un monstruo de su posición, y nada... Pregúntale si se siente querido, respetado y valorado en este país. Sin duda que hay una admiración por él y un respeto, pero no como debiera ser. Entonces, no lo sé. Me preguntas y no sé por dónde viene eso. Pero es así. Es una pena, porque hay gente de mucho valor en todas las áreas en nuestro país.