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U. de Chile

El símbolo mayor de la nueva U

Vino de la B, de inmediato obtuvo un puesto de titular y no dejó más el equipo. Con el DT Álvarez evolucionó en su juego y hoy es la figura azul.

Actualizado a
El símbolo mayor de la nueva U
JONNATHAN OYARZUN/PHOTOSPORT

Universidad de Chile sigue dando muestras de su buen momento futbolístico en el inicio del Campeonato Nacional 2024. En la fecha pasada, los azules superaron por 1-0 a Unión Española y hoy por hoy son los únicos líderes en la tabla de posiciones, pese a que tienen un partido menos que Iquique, su escolta. Maximiliano Guerrero anotó la única cifra en el estadio Santa Laura, ratificando que ha sido la gran figura del conjunto dirigido por Gustavo Álvarez.

Acierto absoluto

Guerrero se ganó un lugar de inmediato en la oncena del DT argentino. Apareció siempre de titular en los partidos preparatorios, también durante las fechas de estreno en el torneo y hoy nadie cuestiona su presencia en la oncena inicial. La regularidad ha sido la tónica en su llegada a la U, con momentos, eso sí, de máximo desempeño.

La actualidad de Guerrero también es gran mérito de Álvarez. El estratega azul lo mantuvo en la posición de puntero derecho, pero evidentemente expandió su funcionalidad, otorgándole otros recursos individuales de juego. De un extremo vertical y veloz en La Serena, y también en la Roja de Santiago 2023, pasó a ser un atacante con incidencia también otros sectores de la cancha.

En esto influye el contexto del sistema 1-3-4-3 que emplea Álvarez. La presencia única de dos volantes centrales (Marcelo Díaz e Israel Poblete) y también de un tándem de carrileros (Fabián Hormazábal y Marcelo Morales) provocó que Guerrero ocupe también los pasillos centrales de ataque. En esta fase del juego, exhibe movilidad, perfil asociativo y profundidad parar llegar al área penal oponente. Llegó ya a tres goles en 2024.

‘Socio’ ideal

La zona derecha es el hemisferio predominante en el volumen de juego que gestan los azules. Guerrero tiene un rol clave al respecto y mucho tiene que ver también en esto la sumatoria de interacciones con Fabián Hormazábal. El ex O’Higgins es también otro de los aciertos en el equipo que ha diseñado Álvarez.

Guerrero se entiende a la perfección con el rancagüino. Quedó en evidencia en el gol del triunfo en el estadio Santa Laura, cuando Hormazábal ganó en profundidad con una conducción agresiva, tras un “robo” de balón. De inmediato buscó al puntero, cerrado y como un segundo 9 dentro del área penal, para que finalizará la acción con un tiro inatajable.

Lo mejor de la dupla es el desempeño posicional. Ambos refuerzos manejan a la perfección el uso correcto de los espacios de ataque por el hemisferio derecho. Hormazábal transita por la zona exterior y Guerrero funciona en el espacio intermedio, cerca del arco rival para desequilibrar e intentar concluir las acciones de ataque. En ocasiones se invierte la disposición original con el balón en movimiento. Así, resulta difícil contenerlos.

De la B a un grande

Si los hinchas de la U tenían alguna duda en torno a la llegada de Guerrero, estás se disiparon completamente luego de la buena actuación del ex La Serena en Santiago 2023. En otro contexto táctico, signado por el sistema 1-4-3-3 típico de Eduardo Berizzo, generó siempre profundidad, éxito en el uno contra uno y habilitaciones con riesgo hacia el centro del ataque.

Tan bien fue evaluado, que el ex DT de la Roja lo incluyó en la convocatoria para la doble fecha de las Eliminatorias posterior a los Juegos Panamericanos, ante Paraguay (0-0) y Ecuador (0-1). Guerrero incluso debutó en la Selección y fue ante la escuadra guaraní, en el Monumental. Ingresó en los minutos finales por Víctor Dávila.

Ya había llamado la atención en el Campeonato Ascenso 2024 y la ligazón con el cuadro azul resultaba inevitable. Una fase importante de su proceso formativo lo desarrolló en la U. Sin embargo, la historia reciente del club está llena de protagonistas que llegaron desde la B como figuras y nunca encajaron en la exigencia de uno de los grandes del país.

Guerrero no ha necesitado ni siquiera una etapa de adaptación. En las primeras formaciones de Álvarez ocupó inmediatamente un sitio como titular y siguió así hasta hoy. Durante la pretemporada, algo detectó el DT que lo hizo inclinarse por la presencia permanente del atacante, quien le ha respondido a cabalidad.