ASCENSO
El último escándalo del fútbol chileno: partido se jugó sin autorización
El encuentro estuvo en riesgo de suspenderse hasta último minuto, y aunque finalmente se jugó, podría haber castigo para el cuadro caturro.
El fútbol chileno logra algo muy difícil cada semana: superarse a si mismo. Esta vez el escándalo se vivió en la Primera B, y tuvo como protagonistas a Santiago Wanderers y San Marcos de Arica.
Ambos equipos se enfrentaron ayer en el Estadio Nicolás Chahuán de La Calera, y aunque parecía que lo más vergonzoso era la negativa del delegado presidencial de Quillota para que el encuentro se jugara, el post partido ofreció una historia aún peor.
Pasó que ambos equipos se midieron sin la autorización del delegado de la autoridad de Quillota y Carabineros, que incluso entregó un informe donde se especificó que no estaban las condiciones de seguridad para el evento, el cual se desarrolló sin público.
La insólita situación podría derivar en una sanción para Santiago Wanderers, quien ofició de local en Quillota, por no cumplir con la normativa. El elenco caturro tuvo que modificar la localía debido al cierre del Estadio Bicentenario Elías Figueroa por la sede de los Juegos Binacionales, y por el escaso margen para anunciar el cambio de locación ni siquiera vendió entradas.
“Condenamos la insistencia del club Santiago Wanderers de realizar un evento sin autorización, no respetando el reglamento ni las normativas vigentes”, sostuvo el delegado José Orrego. “Como Gobierno vamos a perseguir las responsabilidades y vamos a buscar las máximas sanciones posibles por la realización de este evento sin las autorizaciones legales”.