La nueva UC de Holan repite la fórmula ahora en la Libertadores

Universidad Católica disputará un partido crucial en su propósito de acceder a la siguiente ronda en la Copa Libertadores. El elenco ahora conducido por Ariel Holan, en el estadio Maracaná, enfrentará a Flamengo, actual líder del Grupo F con 10 puntos, y precisa un resultado favorable para seguir con chances. El escolta de los brasileños es Talleres de Córdoba (7), que se medirá contra Sporting Cristal, en Lima.

Con Flamengo virtualmente clasificado a los octavos de final, en el elenco chileno el objetivo consiste en acortar la distancia respecto del cuadro argentino. Si no, al menos conservar la posibilidad matemática de definir el segundo puesto en el duelo entre ambos elencos, que cerrará el grupo en San Carlos de Apoquindo. Para ello, Holan, quien no estará en Brasil tras dar positivo en el PCR previo al viaje, mantendrá la fórmula táctica de su reestreno en la banca cruzada.

Inesperado formato

El DT argentino sorprendió en el triunfo por 3-0 ante La Calera con un sistema de juego que no estaba en los cálculos, en vista principalmente de su etapa anterior en el club. La escuadra local empleó un esquema 1-3-5-2, formato posicional en el que lo más llamativo resultó ser la inclusión de tres centrales y de una dupla de ataque. La imagen que se observó en San Carlos distó bastante del dispositivo posicional 1-4-3-3, que fue el sello identitario de Holan en su primer ciclo.

La presentación de los cruzados dejó plenamente satisfecho al entrenador de la UC. Tanto, que hoy en el Maracaná los chilenos ingresarán al campo de juego con la misma estructura posicional y se repetirá la alineación del domingo pasado ante el cuadro calerano.

Sebastián Pérez estará en la portería y la labor defensiva estará a cargo de los zagueros Tomás Asta-Buruaga, Nehuén Paz y Alfonso Parot. El trío de mediocampistas estará compuesto por Ignacio Saavedra, José Pedro Fuenzalida y Felipe Gutiérrez, y contará con el respaldo de los laterales-volantes Aaron Astudillo y Cristian Cuevas. A la dupla de atacantes le darán vida Fernando Zampedri y Diego Valencia.

Otro tono

La propuesta posicional de Holan llamó la atención también por ir en contra de los postulados tácticos que parecen ser permanentes en la UC. De hecho, cuando el anterior DT Cristian Paulucci intentó corregir el rumbo futbolístico, empleando también la estructura 1-3-5-2, en San Carlos surgieron comentarios en orden a que el plantel se encuentra estructurado para actuar según las directrices del sistema 1-4-3-3. No hay que olvidar que el eje táctico de los cuatro títulos nacionales fue precisamente este esquema y las únicas variantes tuvieron que ver con la presencia de un doble ‘6′ y un ‘10′ en el mediocampo.

El cambio posicional impulsado por Holan se sustenta en la mayor seguridad defensiva que aporta el nuevo esquema. En fase de defensa organizada, el equipo se estructura con una línea de cinco hombres y por delante se aglutina un trío de volantes como primer grupo de contención. En total, excluyendo al arquero, el bloque de protección de la portería se compone de ocho integrantes nominales.

La flexibilidad del dispositivo espacial radica, al momento de atacar, en que velozmente los laterales-volantes (Astudillo y Cuevas) pueden convertirse en delanteros, brindando profundidad ofensiva por su sector y alternativas de habilitaciones a la dupla de delanteros (Zampedri y Valencia). Además, los mediocampistas mixtos (Fuenzalida y Gutiérrez), entre sus obligaciones, deben también sumarse al bloque de ataque para generar volumen y también ocupación de los espacios laterales libres entre los miembros de la defensa rival.