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Entrevista AS

“No hay jugador chileno que hable mal de Rueda; solo tuvo mala suerte”

Cristian Venegas Traverso narra en su libro “Los Caminos a Qatar 22. Historias Sudamericanas”, todos los detalles de unas clasificatorias “súper tristes”.

Andrés Marín Zúñiga
Actualizado a
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Futbol, entrenamiento de la seleccion chilena en el hotel Principe Felipe
El entrenador de la seleccion chilena Reinaldo Rueda es fotografiado durante el entrenamiento vespertino realizado en el Club Resort La Manga Hotel Príncipe Felipe de La Manga, Espana.
08/10/2019
Andres Pina/Photosport

Football, Chilean National team training session
Chile's manager Reinaldo Rueda is pictured during the afternoon training session held at the field of the Club Resort La Manga Hotel Príncipe Felipe in La Manga, Spain.
08/10/2019
Andres Pina/Photosport
ANDRES PINA/PHOTOSPORT

Las luces del Mundial de Qatar 2022 se empiezan a apagar, pero la conversación sobre la consagración de Argentina se extenderá largo tiempo. Es lo que ocurre cada cuatro años. Una ruta que comenzó mucho antes del partido inaugural, y que el escritor Cristián Venegas quiso retratar en su último libro: “Los Caminos a Qatar 22. Historias Sudamericanas”.

En él, el autor narra historias imperdibles, como el trasfondo del suspendido duelo entre Brasil y Argentina, el caso Byron Castillo que puso en riesgo la clasificación en Ecuador; las pildoritas del “Plan Calama”, un gol fantasma en el Centenario, ente otras polémicas. Además se explaya en los tortuosos días de Sampaoli en la banca albiceleste, el doping por cocaína del peruano Paolo Guerrero, o la pelea entre entre Claudio Bravo y Arturo Vidal.

- ¿Cuál fue su motivación por escribir el libro?

- El año pasado yo había publicado el Anecdotario de las Clasificatorias Sudamericanas, que es un compilado desde el mundial de 1930 hasta la Copa del Mundo de Rusia 2018, por eso tenía en mente escribir un libro más enfocado al proceso clasificatorio de Qatar. Era interesante mirarlo por todo lo que ocurrió, como por ejemplo, la pandemia, lo que provocó resultados extravagantes, como la impresionante campaña de Brasil o la de Argentina, que desde el año 2002 no tenía un rendimiento tan espectacular como el que tuvo. Sin duda un mundial extraño, porque había que jugarlo en noviembre, en nuestro verano y no en invierno como era lo habitual. Más bien, tiene que ver con eso.

- El libro comienza relatando lo que fue el escándalo entre Claudio Bravo y Arturo Vidal, en la eliminación de la selección chilena en el Mundial de Rusia 2018. Analizando la clasificatoria de Chile a Qatar 2022, ¿cree que este caso fue determinante en el equipo?

- El impacto fue menor y no explica la eliminación de Chile al Mundial de Qatar, pero si le trajo muchos problemas al proceso de Reinaldo Rueda, quien llegó a un camarín roto, donde se hacen evidentes estos liderazgos cuando chocan entre sí. Además hay que considerar que Chile solo estuvo un par de fechas dentro de los clasificados, por lo que siempre estuvo fuera de la Copa del Mundo. No hay recambio, este el problema, aunque claro si afectó, pero es importante tener en consideración que para quienes no somos futbolistas, no tenemos tan claro lo que son los códigos de camarín. Es un espacio muy “sagrado” y cerrado, por eso se vio muy mal que Claudio Bravo contará situaciones a su esposa, porque como te digo, el camarín es un lugar muy cerrado. La verdad, no creo que haya afectado a nivel futbolístico, pero si lo hizo a la primera parte del proceso comandado por Reinaldo Rueda.

- Usted relata también, el conflicto que hubo entre Lionel Messi y Jorge Sampaoli, además indaga en las peleas del propio DT con Sebastián Beccacece.

- Primero decir que el proceso Sampaoli-Beccacece partió con mucha aceptación. Pero, en el primer partido que dirige Sampaoli por los puntos, él le pide a Messi y compañía salir con un lienzo a favor de la demanda por el desaparecimiento del sindicalista Santiago Maldonado, a lo que los jugadores se niegan. Sampaoli siempre ha sido conectado a demandas sociales o es lo que pretenden, pero lo que paso es que los jugadores salieron a la cancha y Messi salió corriendo a pasarle una camiseta a Suárez para promocionar el mundial 2030. Sampaoli a cada jugador le decía que era el mejor, con Messi había más pleitesía, pero luego comenzó a tener problemas con Beccacece y eso lo comenzó a sentir el plantel. El gran problema fue entre ellos, por ejemplo, se dice que, en el último partido con Ecuador, cuando tuvieron una discusión y Messi les dijo pónganse de acuerdo entre ustedes mejor. Beccacece alcanzó mejor relación humana con los jugadores. Scaloni era ayudante, tenía buena relación con el plantel.

- Sin embargo, la selección Argentina está actualmente en un escenario totalmente diferente. Y usted cuenta en el libro lo curioso del caso Scaloni.

- Lo que pasa con Argentina es algo muy raro. De Basile hacia adelante lo único que se ganó fue la Copa América 2021. Y el fenómeno Scaloni es muy raro, comenzó a formar parte del Staff técnico de Jorge Sampaoli, donde comenzó a tener buena relación con los referentes del equipo. Fue toda una apuesta del “Chiqui” Tapia, ya que Scaloni nunca había sido entrenador de un primer equipo, jamás. La AFA no tenía plata, estaba quebrada después de despedir Sampaoli, nadie quería agarrar la selección. Luego, este comienza a dar resultado en la Copa América de 2019, donde tras un buen torneo, pasa a ser el entrenador oficial. Cuento también, que Menotti convence al presidente de la AFA, para que le de la selección a Scaloni. Si bien el referente máximo es Messi, y luego está Di María, también hubo una renovación de plantel enorme. Los jugadores le creen a Scaloni. Es muy raro que un entrenador sin experiencia tenga estos resultados. Desde la época de Bielsa que Argentina no lograba tantos puntos. Es notable lo que ha hecho Scaloni, fue una apuesta súper arriesgada, pero resultó. Lo de Chile no es sorpresivo. A mí me daba pena escribir lo ocurrido en Rusia, pero acá no me alcancé a bajonear.

- Mientras que al otro lado de la cordillera se contrató a un entrenador con experiencia como Reinaldo Rueda, y luego a un conocido del medio como Martín Lasarte. ¿Cree que a Rueda le faltó esa cercanía con el plantel, como la tenía Scaloni, para así lograr mejores resultados?

- No hay jugador chileno que hable mal de Rueda. En Barranquilla cuando Colombia le pasa por encima a Chile, todo el plantel fue a saludarlo. Rueda tuvo muy mala suerte. El estallido, el problema Vidal y Bravo, también la pandemia. Casi un año sin jugar, no poder contar con algunos jugadores por la pandemia. Además lo que ocurre con Ben Brereton tiene que ver con la suerte. Si él dice que su mamá es chilena, nadie se entera. Y lamentablemente Lasarte con sus armas no podía hacer mucho. Es el declive de la generación y del fútbol chileno. Uno no ve referentes que les hagan sombra a los jugadores de la generación dorada. No hay recambio y no lo hay por mala suerte, tampoco se le ha dado la importancia al fútbol juvenil.

- ¿Cuál fue el efecto de la pandemia en las clasificatorias?

- Es increíble a nivel de resultados. Brasil y Argentina son los grandes beneficiados por el hecho de tener más plantel, contar con una mayor cantidad de jugadores de nivel, cuando en otras selecciones muchos jugadores quedaron fuera, se notó la banca. Por ejemplo, Chile no tenía, Paraguay tampoco, Venezuela y Bolivia menos, pero Brasil y Argentina si la tenían. En tema de resultados podemos decir que prácticamente hay la misma cantidad de triunfos de las visitas y empates que en clasificatorias anteriores. Por lo que en eso, la pandemia no fue un factor importante. También es importante el fenómeno de Ecuador, en el libro hablo lo que pasa en los últimos 30 o 40 años. Allá se habla mucho de los niños con bigote, juegan con edad adulterada. En el libro me doy el trabajo a nivel de investigación en textos académicos, donde te encuentras con tesis que se investigan estos casos, como por ejemplo, de suplantación de identidad. El caso de Byron Castillo estaba claro que era un fraude por todos lados. Hay un desorden administrativo y Ecuador la sacó súper barata. Aunque, Ecuador ha tenido un desarrollo futbolístico, se nota que hay preocupación por invertir, y que apostaron por formar jugadores.

- ¿Qué otras historias cuenta en el libro?

- Hablo del caso Qatar Gate, lo ocurrido con Paolo Guerrero y el doping por cocaína que casi le impide jugar el mundial, hablo de este detalle de la clasificación de Argentina en Quito, y que en 2019 vuelve a salir el tema cuando se especuló que la selección argentina Sub17 se dejó ganar 4-1, para dejar fuera a Perú, dándole así una vuelta de mano por la clasificación adulta al Mundial de Rusia. Repaso también, lo que pasó en la suspensión del partido Brasil y Argentina. Me meto en eso y el por qué ocurrió. Cuando ingresa la gente pensaba que era para parar el partido, pero la idea era sacar de la cancha a Emiliano Martínez, Lo Celso y Romero. Esa era la intención, por eso hubo una modificación en la Conmebol para que no vuelva a ocurrir.

- ¿Qué hay de especial en las clasificatorias sudamericanas rumbo a Qatar 2022?

- Que el período es bien oscuro. Si algo me gusta en mis libros es hacer humor, pero encontré poco para hacerlo, ya que fue muy escaso. Por ejemplo, cuando sacaron agua de las posas con vasos en Bolivia o los banderines con chalecos reflectantes en Calama, cuestiones anecdóticas así, pero la verdad es que estas clasificatorias fueron súper tristes. Canchas silenciosas, el VAR hizo que uno no grite el gol tranquilo porque algo podía pasar, en resumen una eliminatoria bien oscura, que además nos pilló en pandemia. Una clasificatoria más bien triste en comparación a otras. Se espera que para 2026 se recupere la algarabía y la gracia que tiene el fútbol sudamericano.

De querer comprar “Los Caminos a Qatar 22. Historias Sudamericanas”, los canales de comunicación son: tejero.ediciones@gmail.com y el Instagram de su autor, @venegas.traverso.