Entrevista AS
Pasó por la Roja, le decían ‘Messi chileno’ y hoy es electricista: “Conocí la noche y toqué fondo”
Robert Méndez fue sparring de la Selección de Marcelo Bielsa y se retiró con sólo 23 años: “Algunos compañeros me decían ‘puta, la cagaste’”.
Robert Méndez (33) dejó atrás el fútbol. El ex volante, que en algún momento fue sparring de la Roja de Marcelo Bielsa, se desempeña actualmente como electricista en la mina Quebrada Blanca de Iquique. Un panorama que, en sus mejores días como jugador, de seguro no imaginaba.
Méndez militó en Universidad de Concepción, Deportes Iberia y Fernández Vial, y se retiró con sólo 23 años. En la Selección, el entonces ayudante Eduardo Berizzo llegó a apodarlo como el ‘Messi chileno’ por su parecido físico y técnico con ‘Leo’, pero Robert no encontró un equilibrio y quedó en el camino.
Hoy, el ex futbolista habla de su vida con AS. “Cuando me retiré del fútbol, pasé un momento malo... Trabajé de jornal, en la construcción, y manejé un camión de materiales, pero después un amigo me ofreció trabajar en el norte y ahí me estabilicé un poco”, cuenta el oriundo de la Octava Región.
- ¿Fue un cambio muy brutal después de dejar el fútbol?
- Sí, fue muy rápido y eso me pesó, pero tuve que apechugar y darle, porque justo en ese momento había tenido a mi hija. Ahora ya me siento más estable con mi familia y fui papá de nuevo. Mi hijo tiene tres meses y estoy tranquilo. De repente igual hago deporte los domingos en el club de mi barrio, Chiguayante Sur.
- ¿Qué le genera recordar que fue sparring de la Roja de Bielsa?
- Son bonitos recuerdos que nunca se me van a olvidar. Ahora, incluso, cuando me llamaste y empecé a buscar fotos, igual me dio un poco de pena y rabia, porque, con la madurez de ahora, a lo mejor hubiese sido distinta la cosa.
- ¿Cómo surge el apodo ‘Messi chileno’?
- Cuando era sparring, tenía como el mismo pelo de Messi, ese largo que usaba antes, y yo era zurdo y jugaba igual que él. Me gustaba encarar en diagonal... Y bueno, la cosa es que Berizzo me puso ‘Messi’ y después, Bielsa me empezó a decir así. Hoy hasta en la pega me dicen Messi (ríe).
- Usted decía que ahora está jugando a nivel recreativo. ¿Queda talento?
- Sí, algo queda. Obviamente lo físico, correr todo el partido, no, pero la técnica y lo principal queda.
- ¿Ha pensado en qué sería de usted si hubiese encontrado un equilibrio?
- Yo creo que estaría jugando en Europa o en un equipo grande, porque algunos compañeros que estaban en clubes grandes me decían ‘puta, la cagaste, podrías haber estado en otro lado’.
- ¿Cómo fue que decayó?
- Lo que pasa es que cuando llegué a la U de Conce desde la Selección, el técnico y el club me mandaron al tiro a préstamo. Yo creo que fue un error. Se supone que yo era un jugador de proyección... Fui a Iberia, que estaba en Tercera División, y ahí se ven tantas cosas y no te tienen controlado como en un club de Primera. En Iberia también tuve un accidente en auto...
- ¿Cómo pasó eso?
- Mi compañero, el piloto, se quedó dormido y chocamos con un letrero. Una parte de él me afectó en los pies y ahí me tuvieron que amputar un dedo del pie izquierdo. Estuve como tres meses hospitalizado y ya después de eso perdí estado físico y todo lo que un futbolista requiere.
- Después tuvo un paso por Fernández Vial...
- Sí, me costó agarrar el hilo y me mandaron al Vial, pero ahí conocí la noche y el alcohol... Toqué fondo. Me arrepiento mucho.
- ¿Es de contar su experiencia?
- De repente si me preguntan, sí, pero como que soy un poco reacio a andar contando lo que pasé. Si a mi hijo le gusta el fútbol, voy a ser el primero en estar ahí para que no cometa los mismos errores.
- ¿Es de reflexionar en solitario sobre lo que vivió?
- Sí. Puta, veo fútbol y ahí mismo empiezo a maquinear, a pegarme los cabezazos, de por qué no me porté mejor... A lo mejor me faltó ayuda, alguien que me dijera ‘oye, párala’. Tuve a mi abuela, a mi mamá, pero tú sabes que uno con la abuela es el regalón y te aguanta todo.
- ¿Cree que sus condiciones eran mejores a las que tienen algunos futbolistas que ve en la actualidad?
- Como jugaba en ese tiempo, sí. Hasta yo de repente me digo ‘oh, ¿de verdad jugaba así?’ Era impresionante. Cuando salieron las pruebas para la Selección, Ivo Basay fue quien las tomó y a mí me alabó. Me dijo ‘no, tú eres espectacular...’. Fui el único de la Octava Región que quedó en la Selección en ese tiempo.
- ¿Cómo proyecta su futuro?
- Estoy metido en mis hijos, en la pega y en mis estudios. Me encuentro estudiando técnico en procesos mineros y por ahora quiero mantenerme en Iquique, por el tema de las platas. Está mejor acá.