ADN RadioConcierto Radio
NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Entrevista AS

Su retiro golpeó fuerte: “No quería que esta especie de amargura me fuera apagando”

En la fechas iniciales de Segunda División, optó por dejar el fútbol tras dos décadas: “Las situaciones negativas me estaban golpeando demasiado fuerte”.

Actualizado a
Su retiro golpeó fuerte: “No quería que esta especie de amargura me fuera apagando”

Fue una sorpresa absoluta no solo en Segunda División, sino que también en el fútbol chileno. Cumplidas recién las fechas iniciales de la tercera categoría, Franco Cabrera, de 40 años, anunció su retiro y dejó el arco de San Antonio. El guardameta, intempestivamente, cerró una etapa de más de dos décadas en el profesionalismo, actuando en las tres divisiones nacionales. De vuelta en su hogar y en compañía de su esposa, Lorena Góngora, y sus dos hijas, Agustina y Amparo, Cabrera conversó con AS.

“Lo primero que quiero aclarar es que San Antonio es un lindo club, tiene gente muy dedicada para que les vaya bien y tenía un cuerpo técnico muy trabajador y un grupo de jugadores muy comprometidos, que van a pelear por lograr los objetivos colectivos. No me sentía bien, he sido toda la vida un tipo muy positivo, muy trabajador, muy optimista. Sentí que las situaciones negativas que estábamos viviendo como equipo me estaban golpeando demasiado fuerte. Siempre sentí que cuando uno no está disfrutando con lo que hace, tiene que dar un paso al costado”, sostuvo Cabrera.

- Para peor sufrieron una dura derrota por 7-2 contra General Velásquez…

- Sí, yo creo que de ahí parte todo. Fue duro porque te hace dudar y te complica el presente. Después, fue una semana muy difícil para mí, puedes vivir goleadas así, pero en este momento me golpeó muy fuerte. Somos el equipo que se armó de mejor forma, el candidato al título, y pasar por una situación así, complica. En otros momentos, me he podido recuperar de mejor forma, pero en esta oportunidad no fue así. Me pegó fuerte y me demoré muchos días en volver a ser yo.

- ¿Abordó primero la problemática que estaba viviendo con su familia?

- Sí, totalmente. Con mi mujer, tenemos una relación de 20 años y ella está conmigo desde que empecé en el fútbol. Hemos pasado por las malas y las buenas, me tocó ascender, descender y lograr algunos títulos. Pasé por muchas etapas y ella sabe cómo amo esta profesión. El verme así, con muchas noches sin dormir, pensando y dándole vuelta, me apoyó de todo corazón. Ellas y mis niñas van a estar como mi mayor motivación en todo lo que decida.

- ¿Lo que siente puede ser producto ya del desgaste anímico de más de 20 años de carrera?

- Sí, lo asocio a eso también. También pesó la edad que tengo y el esfuerzo que se está haciendo en el club y haber vivido esa derrota contra General Velásquez me pegó fuerte. Sentí que le estaba fallando a mucha gente, que estábamos en el camino equivocado. Era demasiada la autocrítica y decidí dar un paso al costado.

Cabrera junto a Roberto Cereceda en un entrenamiento de San Antonio en 2024.
Ampliar
Cabrera junto a Roberto Cereceda en un entrenamiento de San Antonio en 2024.

- ¿Cómo fue llegar a la gente del club y al plantel anunciando que se retiraba? La temporada recién está comenzando.

- Fue una situación triste. Lo primero que hice fue comunicárselo al preparador de arqueros. Después tuve la posibilidad de hablar con el entrenador y luego con el presidente. A continuación con el gerente deportivo y con mis compañeros en el camarín. En toda mi carrera, nunca terminé un proceso antes, siempre llegué hasta el final. Tampoco me sacaron de un plantel, tengo una conducta dedicada al fútbol. En el camino al camarín y luego hacia mi casa fue solo llorar. Esto no es un retiro para aparecer en dos meses después en otro lado. Lo hago con la seriedad que corresponde y no estoy para jugar con las emociones de nadie.

- ¿En medio de la tristeza pudo sentir algo de alivio también por terminar con la situación que lo tenía complicado?

- Sí, me siento más tranquilo y con la sensación de que lo que estoy haciendo es por mí y mis compañeros. Ellos están acostumbrados a ver a un tipo alegre, que motiva, que siempre está empujando hacia adelante. No quería que esta especie de amargura me fuera apagando y terminara siendo otra persona en relación a lo que he entregado en más de 20 años de carrera.

- ¿Qué viene ahora para usted?

- Por ahora, voy a seguir digiriendo esta situación por algunos días. Pronto tengo que empezar a definir lo que voy a empezar a hacer hacia adelante. También tengo que generar recursos para mantener una familia, tengo que responder con las cuentas. Están mis hijas, mi mujer y mis padres. Se rompe la burbuja del fútbol y empieza la vida.

- ¿Tiene algo encaminado ya, como puede ser un emprendimiento u otra cosa?

- Tengo la carrera de entrenador cursada, soy preparador de arqueros y también preparador físico. Tengo unos cursos de proyectos y me gusta mucho también el tema comercial. Me he capacitado, he estudiado y amo lo que hago. Siempre estuvo la idea de seguir ligado al fútbol. Hoy me siento un poco cansado de cabeza y no sé por qué habrá pasado esto. Quizás debí haberme asesorado también por un especialista, algún psicólogo deportivo, qué sé yo… pero tomé la decisión. Lo hice de corazón y es lo que me ha caracterizado siempre. Pude construir una carrera linda, no es la de Claudio Bravo, pero es la carrera de un jugador común que la hizo en base a esfuerzo.