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Entrevista AS

Superó un cáncer y está de vuelta en el Torneo: “Cuesta estar preocupado de quimios”

Franco Torgnascioli, portero de Everton, retornó a las prácticas el pasado lunes. Lo hizo tras dejar atrás un cáncer testicular: “Fue un baldazo de agua fría”.

Superó un cáncer y está de vuelta en el Torneo: “Cuesta estar preocupado de quimios”

Este lunes 7 de marzo fue un día especial para Franco Torgnascioli (31). El portero uruguayo regresó a los entrenamientos de Everton de Viña del Mar, luego de lidiar con un cáncer que lo alejó de las canchas durante todo el inicio de la temporada. El pasado 10 de enero, el charrúa anunció en sus redes sociales que había sido operado de urgencia debido a un tumor testicular maligno y, un mes después, inició su proceso de quimioterapias. Hoy ya está de vuelta.

“Me recibieron muy bien. He recibido muchísima buena vibra de todos lados y eso ayuda mucho. Yo tenía ganas de volver, muchísimas ganas, te podrás imaginar… hay un gran grupo en Everton, tengo grandes amigos y me hicieron sentir muy bien. Así que ya estoy entrenando con todo”, señala el guardametas del cuadro ruletero, en diálogo con As.

- En Everton estuvieron muy preocupados durante estos meses...

- El club se portó muy bien conmigo. En todo momento me dieron su apoyo al cien por ciento, me dijeron que estuviese tranquilo, que me preocupe de recuperarme, de hacer las terapias, y que cualquier cosa que necesitase estarían a disposición. Me dijeron que me estarían esperando, así que sentí mucho el apoyo. Hace varios años ya pertenezco acá, así que se agradece.

- ¿Qué sintió cuando sus compañeros saltaron a la cancha con un lienzo que decía “Fuerza Franco” en el duelo ante Colo Colo?

- La verdad es que mucha emoción. Me hicieron sentir bien todos estos meses. En todo momento me escribieron, estuvieron pendientes de mí, es algo muy lindo. Y la pancarta que usaron ese día fue justo el día antes a empezar la quimioterapia, justo fue en ese momento, entonces a uno le da fuerzas y motivación para arrancar ese proceso.

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- ¿Cuándo se enteró de la enfermedad?

- Los primeros síntomas que tuve fueron en la semana previa al partido con la UC, que era la última fecha del torneo pasado. Había tenido un poco de dolor en la pelvis y en un testículo en la práctica. Recuerdo que esa semana, nosotros jugábamos el domingo, y el jueves me dio un poco más fuerte, así que fui con el médico del club y me dijo que podía ser varicocele. Después se me pasó, jugamos, y creí que no había apuro en tratar. Yo me iba de vacaciones, además, entonces tenía pensado a la vuelta a Chile ir al urólogo y verme. Pero allá en Uruguay comenzó fuerte, y se me inflamó un testículo, era mucho dolor. Yo estaba en Montevideo en ese momento, había salido a cenar con mi esposa, mi hermano y su esposa. Eso fue un viernes. Esperé hasta el domingo y ahí fui a emergencias. Eso fue el 19 de diciembre. Ahí me hicieron la ecografía y me dijeron que tenía un tumor testicular. Me operaron dos días después, por suerte.

- ¿Cómo recibió una noticia tan impactante?

- Cuando te dicen que tienes un tumor, ya la palabra impacta muchísimo. Fue un baldazo de agua fría, porque nadie se lo espera, y menos yo, por la edad que tengo, soy deportista y trato de llevar una vida saludable. No te lo esperas. Pero bueno, me costó, sobre todo el primer día cuando me enteré. Después puse la cabeza en poder hacer todo lo más rápido posible, ocuparme en lo que debía hacer. Por suerte, como te digo, me operaron rápido, me hicieron exámenes y los doctores me dieron un pronóstico muy positivo. Ahí ya estaba más tranquilo, porque el pronóstico era alentador.

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- ¿Qué fue lo más difícil de este proceso que vivió durante los últimos meses?

- En realidad, todo es difícil. Yo lo llevé muy bien sí, eh. Pero me costaba pensar en todo lo relacionado al fútbol. Venía de un año muy lindo, siendo titular, jugando todo el Torneo y habíamos clasificado a Libertadores. Entonces quería arrancar el año jugando una copa internacional. La imagen que yo tenía en mi cabeza de este año era muy positiva. Y te cuesta saber que tienes que estar preocupado de quimioterapias, que no sabes cuando vas a volver al fútbol, que tendrás que pelearla de nuevo, te juega mucho en la cabeza eso. Además de estar encerrado todo el tiempo, y si a eso le sumas la terapia, es bastante jodido. Pero como te digo, dentro de todo, lo llevé bien. Estaba con mi señora siempre. Ella se encargó de todo, hizo que yo lo pasara lo mejor posible.

- Ahora que ya superó la enfermedad y está de regreso en las canchas, ¿hace alguna reflexión?

- Lo que podría decirte es que siempre hay que disfrutar, tratar de ver el lado positivo de la vida y darle para adelante. Y si pudiera dar un consejo, es ir a controles constantemente. Los hombres parece que somos más quedados para ir al doctor, pero ante el mínimo dolor, anda, no dudes. Hoy en día la medicina está muy avanzada y si se detecta temprano el problema, sea cual sea, es mucho más fácil tratarlo, que fue mi caso, donde el cáncer no había avanzado y con quimio ha andado todo bien. No tengan miedo, vayan al médico.

- Dentro de los futbolístico, ¿cuáles son sus objetivos para esta temporada? ¿Se los replanteó?

- Ahora sí. Bueno, estoy empezando a adaptarme de nuevo y quiero hacer una buena pretemporada para quedar bien físicamente, a la par de mis compañeros, y ojalá pronto estar a disposición del DT. Luego él decidirá quién es el que juega, pero a corto plazo es eso, ponerme bien lo antes posible.