Tiene 17 años y es un proyecto azul: “Dejó de lado a la familia para cumplir un sueño”

Durante la pretemporada, Mauricio Pellegrino, entrenador de Universidad de Chile, subió al primer equipo a un grupo de juveniles que participaron de la preparación azul para afrontar los desafíos de 2023. Uno de ellos fue Zacarías Abuhabda. Con 17 años, el lateral izquierdo ha sido parte de varios entrenamientos con el plantel de honor de la U.

Pero la experiencia no es nueva para el zurdo. ¿La razón? Con Diego López también formó parte de algunos entrenamientos durante 2022. Esos momentos son muy valorados por Zacarías Abuhabda padre. En conversación con AS Chile, el progenitor del joven futbolista habla sobre el crecimiento de su hijo en el CDA.

“Para nosotros como familia es un orgullo lo que está viviendo, porque todo lo que ha logrado lo hizo por sí solo. Vivir en la Casa Azul, lejos de nosotros, le ha permitido darse cuenta que tiene las capacidades para lograr lo que él quiere, que es ser jugador profesional y más en el equipo de sus amores”, dice el padre del lateral que llegó desde Antofagasta a La Cisterna en octubre de 2021.

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Abuhabda padre trabaja en minería como supervisor en SQM, pero tiene un pasado en el fútbol. Fue arquero en Deportes Antofagasta, aunque nunca pudo debutar profesionalmente. A los 20 años decidió dejar el fútbol para trabajar en el área bancaria y luego pasó a la minería.

- ¿Cómo fue el día en el que él les contó que había sido llamado al primer equipo para entrenar?

- La primera vez fue el año pasado con Diego López. Yo justo estaba en el trabajo y me emocioné bastante, porque es el fruto de su esfuerzo, de dejar de lado a la familia para cumplir su sueño. Primero, consolidarse en su serie y luego pasar al equipo de Proyección y ser titular, habla de lo que ha conseguido con su trabajo. Y que López y ahora el ‘profe’ Pellegrino lo consideren, es una alegría tremenda.

- ¿Qué le cuenta él de esos entrenamientos con el primer equipo? Debe ser muy especial para él siendo hincha...

- Nos pasó una situación muy particular cuando recién llegamos a Santiago. Nos tocó ir a una oficina de un representante y justo llegó Ronnie Fernández para firmar en la U. Dos meses después, sale una foto de una práctica en la que Ronnie aparece corriendo detrás de Zacarías luchando por una pelota. Yo le dije a mi hijo ‘¿viste lo que puedes lograr? Un día estás sentado como un desconocido y al otro día entrenas con el jugador que viste que fue a firmar con la U’. Por eso siempre le inculco que luche y que siga esforzándose para lograr sus metas.

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El duro momento familiar que atravesó Zacarías Abuhabda

- Lo llevo al pasado. ¿Cómo se gestó el arribo de Zacarías a la U?

- Tuvimos hartos temas con Antofagasta porque no le querían dar la salida. Él jugó muy poquito allá por pandemia y estallido social, pero por el tema de derechos de formación y todo, quisieron aprovecharse y firmaron unos convenios por unas platas. La U lo vio a través de un veedor (Roberto Gordillo) que estaba junto con Diego Rivarola en el Campeonato Scotiabank cuando tenía siete u ocho años. Zacarías fue a unas pruebas en la U y al final como que quedó en nada. Luego de eso, surgió la opción y lo llamaron. Pasó el primer filtro, pero tuvieron que pedir un permiso para entrenar.

- ¿Cómo fueron las primeras semanas para su hijo teniendo en consideración que dejó Antofagasta para vivir en la Casa Azul?

- Yo estuve inserto en el fútbol y más o menos lo preparamos cuando él estaba en Antofagasta para que fuera más independiente por si es que en algún momento le tocaba irse a un equipo de otra región. Creo que estaba preparado para ese desafío. Para mí como papá, fue un orgullo, para mi señora fue un poco más complejo, porque justo después de eso, ella tuvo un cáncer de tiroides, entonces todas esas emociones se reflejaron de mayor forma en ella.

- ¿Él pensó en algún momento regresar a su ciudad para estar más cerca de su madre?

- Nunca le planteamos esa opción, porque ella se trató en Santiago y eso permitió que estuvieran siempre cerca. Estamos muy contentos, porque mi señora se operó, hizo la terapia y el cáncer desapareció. Está con los controles preventivos, pero ya todo pasó.

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Las señales que ilusionan a Abuhabda

- ¿Cómo es la personalidad de él?

- Es medio introvertido. Zacarías no es mucho de demostrar las cosas, pero las veces que no hemos podido viajar hace notar que echa de menos. Sé que tiene amigos en el club, pero no sé si yuntas inseparables como son sus amigos de Antofagasta. En la U hizo buena relación con Bastián Tapia y se junta mucho con Renato Huerta y otros compañeros de su categoría.

- ¿Siempre fue lateral?

- Él jugaba como puntero izquierdo, pero los entrenadores notaban que le quedaba muy corta la cancha, entonces lo empezaron a probar de lateral para que pudiera recorrerla más. Se fue perfeccionando con el tema de la marca y ahora ha progresado mucho. Lo veo físicamente muy cambiado. Ya no es un niñito (ríe). Diego López le decía que le gustaba mucho cómo jugaba en defensa y ataque.

- ¿Ve factible él debutar pronto en la U? En los últimos tiempos, el equipo ha utilizado laterales izquierdos muy jóvenes...

- Yo creo que eso mismo lo tiene motivado en cuanto a sus expectativas. Pero siempre le decimos que tiene que estar preparado para cuando se dé. Como familia estamos tranquilos, porque es el más chico del equipo de Proyección y es titular y el ‘profe’ Pellegrino lo tiene en cuenta en los entrenamientos del primer equipo. Ha logrado cosas, que quizás son menores, pero nos da una buena señal a nosotros.

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