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ENTREVISTA AS

Viajaron 24 horas en bus para jugar un Mundial por Chile y van por todo: “Queremos eliminar las burlas y prejuicios”

Sólo con autogestión y mucho sacrificio, la selección chilena de talla baja disputa la Copa del Mundo en Buenos Aires. “No contamos con el apoyo de la ANFP, ni del Estado”.

Viajaron 24 horas en bus para jugar un Mundial por Chile y van por todo: “Queremos eliminar las burlas y prejuicios”

Quizás mucho no lo sepan, pero sólo unas horas después que se apagaran las luces de Santiago 2023, Chile ya tiene otro desafío en el horizonte. Una selección chilena se encuentra en Buenos Aires para disputar la Copa del Mundo de fútbol de talla baja. Ésta no vez no hubo presupuestos millonarios, ni apoyo estatal. Fue, más bien, un sueño colectivo, el sacrificio de un grupo autogestionado que sueña con retornar con el título.

Pero no fue fácil llegar hasta ahí. Sin dinero para costear los pasajes de avión, salieron el sábado en bus desde Santiago y llegaron 24 horas después a la capital argentina, sólo un día antes del debut frente a Ecuador en el microestadio Malvinas Argentinas de Argentinos Juniors. El cansancio no importó: golearon por 3-0.

“Nos preparamos entrenando todas las semanas. Tuvimos que hacer muchos sacrificios, dejar compromisos de lado. No contamos con ningún apoyo, de ninguna entidad deportiva. Todos los gastos corren por nuestra cuenta. Nos conseguimos rifas más algunos auspicios de privados que sí han confiado en nosotros. En Argentina, por ejemplo, la AFA si da dinero. Nosotros no tenemos el apoyo de la ANFP”, cuenta Ignacio Córdova, una de las figuras del equipo.

Córdova sabe de lo que habla. “Llegué a la selección el 2016, un año después que se fundó. Durante el camino me ha tocado ver como se ha expandido, me ha tocado llegar a muchas más regiones a nivel nacional y después llegar a más personas, que se motiven. Ha sido un orgullo, un honor y mucha ilusión. Es una linda responsabilidad representar a todo el país”.

Fanático de la Unión Española, comenzó a jugar el fútbol desde que tiene memoria. “Me motivaron mucho mis hermanos. Somos cuatro hombres y siempre respiró fútbol en la casa”, recuerda. A medida que pasaron los años jamás se apartó de la pelota y ahora se ha transformado en uno de los líderes de esta Roja. “Hemos logrado cambiar las burlas y demostrar que somos capaces de todos. Somos personas comunes y corrientes. Hemos convivido toda la vida con prejuicios y nuestra condición se ha asociado a la burla, la mofa, y el mensaje es que las personas que no nos conocen se acerquen, apoyen y vean de lo que somos capaces”.

Ante Ecuador ya demostraron que van en serio y ahora tendrán dos complicados desafíos frente a México e Italia. “Las expectativas que tenemos para el torneo es competir de igual a igual con todos los países. Vamos a darlo todo en Argentina, pelear de igual y nuestro principal objetivo es ser campeón”, afirma.

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