Fue seleccionado chileno y hoy es instructor de CrossFit en Suecia: “Estoy conforme con mi carrera”
“Yo me fui a Europa con 18 años y en mi generación habían 20 jugadores mejores que yo. Llegué a Europa y empecé a escalar”, cuenta el puntarenense.
Harald Feuchtmann (36) jugó por largos años en la selección chilena de balonmano y también en las ligas de España y Alemania. Con la Roja, el hermano de Emil y Erwin (dos de los jugadores más importantes de este deporte en la historia del país) disputó varios mundiales y Juegos Panamericanos, pero hace unos años le dio un giro radical a su carrera: se retiró para siempre del handball y se dedicó a ser instructor de CrossFit. Hoy está radicado en Estocolmo (Suecia), lugar donde abrirá su propio gimnasio en los próximos días (@takefivefitness).
En diálogo con AS Chile, el puntarenense repasó su carrera y habló de su nueva vida. “Me retiré hace como cinco años. Estaba jugando en la Bundesliga 3 de Alemania y trabajaba dos horas al día como entrenador personal. Ya estaba un poco cansado de la rutina y a mi ex polola le salió una opción para trabajar en H&M de Estocolmo. Ese fue un punto de inflexión. Como ya me estaba educando con el entrenamiento y conociendo el CrossFit, decidí venir y hacer la transición de jugar 100% handball a meterme de lleno como entrenador de CrossFit. Fue un cambio de aire. Me entrevisté en varios lugares y me contrataron en un gimnasio”, cuenta.
- Fue de la noche a la mañana, entonces...
- Sí. Un año después de eso, Mateo Garralda (ex DT de la Roja de balonmano) me siguió llamando a la Selección, pero tuve un pequeño accidente en moto, me disloqué el hombro y no hice la recuperación como pensando en volver.
- ¿Cómo evalúa su carrera?
- Estoy conforme, porque lo mío fue todo a pulso. A pulso pasé de ser juvenil a jugar en la selección adulta. Yo me fui a Europa con 18 años y en mi generación habían 20 jugadores mejores que yo. Llegué a Europa, empecé a escalar y comencé también a ganar plata con el handball, entonces me deja contento haber jugado tantos años profesionalmente. En la selección chilena disputé mundiales, gané muchas medallas y jugué muchos años con mis hermanos, eso es impagable. Quizás podría haber aguantado para llegar a Santiago 2023, pero igual estoy conforme.
Harald Feuchtmann y su vida en Estocolmo
- Ahora va a abrir su propio gimnasio...
- Sí. En Estocolmo yo llegué a un gimnasio de alto nivel, empecé a exigirme mucho más, me fui certificando y así fui escalando. Por eso ahora abriré mi propio gimnasio. Es un emprendimiento, pensamos abrirlo en enero.
- ¿Se piensa radicar definitivamente en Estocolmo?
- Ahora mismo empezaremos con mi colega este proyecto y estaremos atado ahí por lo menos unos cinco años. No descarto moverme a España en un futuro, porque Emil está ahí, mi hermana Inga vive en Madrid y mis papás también se moverán a Alicante ahora.
- ¿Cómo es la vida en Suecia?
- La gente es seca, aunque hay de todo. El clima es frío, los días son oscuros y el sol dura poco. Pero también Estocolmo es una ciudad muy cosmopolita, hay mucha vida y es muy acogedora. En verano no hay oscuridad, lo verde explota y hay paisajes muy lindos para disfrutar.
- ¿A Chile no vuelve?
- Es difícil, porque ahora está la familia acá, pero sinceramente no sé. Punta Arenas me tira mucho, así es que quién sabe...