El ‘9′ anhelado en Colo Colo
Hacía mucho tiempo que querían contar con un jugador así y parece que finalmente lo encontraron. Esperaban un centrodelantero que llegara al Monumental, se pusiera la camiseta alba y, de inmediato, encajara en el funcionamiento colectivo. Martín Lucero lo ha hecho. Quedó otra vez claro con la actuación del argentino en la buena victoria por 2-0 contra Internacional de Porto Alegre, por la Copa Sudamericana.
Lucero no necesitó de una etapa de adaptación en su llegada a Colo Colo. El ‘9′ rápidamente impuso sus contenidos de juego individuales y no hubo dudas de que lo suyo iba a ser un aporte de valor. Claro, el piso estaba bastante bajo, luego del mal trance de Nicolás Blandi por el Monumental. Su antecesor en el rol de ariete recaló en el Cacique con mayor y mejor cartel, al punto que nadie dudó de que acá le iba a ir súper bien. Pero todo salió mal para el actual atacante de San Lorenzo.
Había que escoger con sumo cuidado una apuesta similar para el ataque en 2022, considerando también que la etapa de Iván Morales estaba concluida en el club. De pronto surgió el nombre de Lucero y la posibilidad atrajo de inmediato. El ariete exhibía un pasado inmediato con regularidad en el ataque de Vélez Sarsfield y contaba con chances de seguir en el cuadro bonaerense, pero pretendía dejar Argentina por una nueva oportunidad en el exterior. Antes jugó en México y Malasia.
El trasandino encajó de inmediato. Los que esperaban un ‘9′ típico, al estilo de Fernando Zampedri, por ejemplo, no acertaron. Lucero es un centrodelantero de juego, asociativo, que abandona el eje del ataque para intervenir en la construcción o también generar espacios. Esto pudo provocar algunas dudas iniciales en torno a su aporte, porque en el Monumental esperaban principalmente goles. Sin embargo, el ariete ha convertido regularmente. Por el debut en la Copa Libertadores, anotó en el triunfo por 2-1 contra Fortaleza, en Brasil, a comienzos de año. Ahora, durante el estreno en la Sudamericana, lo hizo también al abrir la cuenta ante Internacional.
Esta ha sido la principal fortaleza de Lucero. La idea era que respondiera principalmente a nivel internacional y lo ha hecho a plenitud. Fue titular en los seis partidos de la fase de grupos de la Libertadores, con un desempeño parejo en cada encuentro. Claro, seguramente algunos no olvidan el 1-1 contra Alianza Lima, en Perú, duelo en que el argentino se perdió muchos goles. A la larga, ese partido le impidió a los albos estar hoy disputando los octavos de final de esa Copa y no la actual instancia de la Sudamericana. Pero fue solo un momento de la actual campaña en Colo Colo y no opaca su buen desempeño.
El eje del aporte de Lucero es su sentido colectivo del juego, pese a actuar en la posición de centrodelantero, una de las funciones que demanda un mayor ingrediente de egocentrismo. En muchas ocasiones, el ‘9′ tiene que pensar en sí mismo y en nadie más para darle valor a su gestión, sobre todo en la finalización de las acciones ofensivas. A veces, algunos se cofunden y creen que tal exigencia se expanden a otros momentos del juego. Entonces, surgen los problemas: definen cuando hay que habilitar, driblan cuando la maniobra exige un pase o, en el peor de los casos, resuelven con un tiro en circunstancias que el peso de la acción exigía enviar el centro.
No pasa esto con el ‘9′ de Colo Colo. Ha disputado 23 partidos durante la temporada, anotó 15 goles y suma cinco asistencias. Las habilitaciones para convertir son un dato no menor y reflejan que su rol también es clave en la construcción ofensiva. Es quien debe recibir el pase para convertir y, en importantes circunstancias, pasa todo lo contrario, él asiste. Los albos, esta vez, sí acertaron con el ‘9′ que fueron a buscar a Argentina.