El extraño caso Almirón
El DT ha dirigido equipos grandes, gigantes y chicos. Le ha ido bien y mal. Ese recorrido le permite comprender cuando la situación es insostenible.

Los números de Colo Colo este 2025 no son buenos. Los objetivos se han reducido exclusivamente al torneo local, porque el Cacique quedó afuera de toda competencia internacional demasiado pronto y también se despidió de la Copa Chile. Escenario agravado por sendas goleadas ante Fortaleza, Racing y Limache. Sin embargo, la afición no ha reprobado al técnico Jorge Almirón, como ha ocurrido en otros momentos. ¿Por qué?
Como pocas veces, la sensación de una debacle general se ha proyectado a todos los estamentos de Colo Colo. Una lucha directiva que vive reiterados episodios, un rendimiento en cancha que ha bajado demasiado en comparación al año anterior y un comportamiento de un grupo de hinchas que generó no sólo una sanción internacional, sino una profunda tristeza en la atmósfera de un equipo que necesita levantarse.
En este contubernio, la mesa central de Blanco y Negro toma decisiones que terminan agravando el panorama. Anunciar públicamente que se va a negociar con el entrenador para despedirlo fue un error de forma y fondo. Al cierre de esta columna no se ha llegado a un acuerdo y se dio el surrealista capítulo de un entrenador que dirigió, sabiendo que la mayor parte del directorio no lo quiere, que fue a la conferencia de prensa a sentarse y reconocer que iba sólo para evitar una sanción mayor y que se fue de la cancha despidiéndose de los hinchas, alzando sus manos, en señal de despedida, en medio de una ovación.
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Almirón es un tipo con experiencia. Ha dirigido equipos grandes, gigantes y chicos. Le ha ido bien y mal. Ese recorrido le permite comprender cuando la situación es insostenible. Estaba dispuesto a negociar una salida hasta la noche del martes pasado, cuando tras una reunión de directorio, los dirigentes de Blanco y Negro anunciaron que no lo querían y que iban a tratar de parlamentar con el técnico para que se fuera. Un exceso de transparencia absolutamente innecesario.
¿Qué pasa si no hay acuerdo? ¿Sigue el DT toda la temporada? ¿Han conversado ya con otros entrenadores? Colo Colo tiene plantel para pelear un campeonato que hoy se ve lejos. La duda es si tiene un equipo para recortar distancia, cuando el foco es sólo uno: salir campeón.
