El retorno del primer campeón

Magallanes es uno de esos equipos señeros, que despiertan simpatía incluso entre los no aficionados a sus colores, porque es un club que siempre ha estado ahí, a veces con más protagonismo, en otras transitando por la cornisa y no pocas veces en el pozo más profundo de las malas campañas.

Magallanes está de vuelta y esa es una buena noticia porque esta consagración es merecida y cuando eso pasa el fútbol se convierte en un bastión de justicia. El equipo carabelero fue líder todo el certamen. En algún momento sacó una ventaja enorme, que parecía irremontable, pero Cobreloa estrechó el margen con una segunda rueda muy potente, aprovechando algunos resbalones del líder. Magallanes supo sostenerlo, aguantar el chaparrón y mantener el tranco hasta culminar con una vuelta olímpica que quizás pocos aventuraron a comienzos de temporada.

Primero porque tiene un técnico joven, que debutaba en el banquillo. Nicolás Núñez fue jugador del club y cuando se retiró lo fueron preparando para asumir el desafío técnico. Algo parecido a un proceso. Y en un fútbol donde los jugadores veteranos son despreciados, Núñez rescató a una serie de baluartes con vasta experiencia y los rodeó de jugadores jóvenes para equilibrar su idea de fútbol: juego asociado, salida desde el fondo, amplitud de cancha, generar espacios con el balón, presión alta, pero alta de verdad.

Rodríguez, Filla, Acevedo, Alucena, Piñero, Crovetto, Espinoza, Aránguiz, Gainza, Cortés, Flores, Zapata, Jones, Vicuña, Jiménez, Villanueva. Nombres propios que se unen en la memoria con el último gran Magallanes, ese que en la década del 80 clasificó inesperadamente a Copa Libertadores, los Comandos de Eugenio Jara, el equipo de Adolfo Nef, Eduardo Vilches, Fernando Medina, Sergio Martínez, Octavio Fritz, Claudio Toro, Luis Pérez, Benedicto Pereira, Eduardo Calquín, Rodrigo Santander, Ivo Basay, Darío Scatolaro, Julio Suazo. Una verdadera Academia.

Tantos que se fueron sin ver a Magallanes otra vez en Primera. Tantos que heredaron la pasión de colores tradicionales. Tantas que pensaron que esto nunca iba a pasar. A veces el fútbol nos recuerda que los humildes también pueden alcanzar la cima.

Regresó Magallanes. ¿Por qué te tardaste tanto? El primer campeón está de vuelta.