Ser de la U (o de cualquier equipo)

Tengo en mis manos el libro Ser de la U de Francisco Mouat, que próximamente estará disponible en librerías. Mejor dicho, logré recuperarlo luego de que mi hijo Antonio, de 14 años, hincha azul, lo devorara en pocos minutos.

¿Qué significa ser de la U? ¿Cómo se explica el sentimiento del hincha azul por sus colores, su historia, su presente y su porvenir? ¿Dónde radica el hechizo que mantiene atado al aficionado a su equipo, más allá de las generaciones y las contingencias?

Lo leo con deleite. La pluma de Mouat se desliza, sin atajos, por vericuetos que parecen conocidos y nos permiten empatizar, aunque palpitemos por colores diferentes. Esto permite reforzar una idea que mantengo hace años: los hinchas, los verdaderos hinchas, se parecen entre ellos mucho más de lo que aparentan. Cuando se ubican en las antípodas del espacio, no se percatan que son similares, con atuendos distintos.

Hay sentimientos que los hinchas comparten de manera transversal, independiente del equipo: fidelidad más allá del resultado, convicción en los peores momentos, héroes y villanos propios, un rival a vencer, que actúa como el equilibrio necesario para construir una narrativa. La idea del sacrificio, del desquite, de la resiliencia, porque todos los hinchas sienten que su club debe remar contra la corriente y poderosos enemigos. La U no es la excepción. Una lealtad de los hinchas que se disfruta en los momentos de algarabía, pero se solidifica cuando la corriente va a contramano.

Ser de un club es mucho más que un gusto o placer. A veces es una elección, a veces responde a razones geográficas, muchas veces se extiende una tradición familiar, o responde a algún futbolista que actúa de referencia. Ser hincha no es un asunto de momentos o campañas puntuales. Ser hincha no es estar pendiente solamente del partido. El hincha construye su ruta, precisamente, de domingo a domingo, entre pleitos, cuando traza un croquis que desemboca en el día en que tu equipo entra a la cancha y la atención difícilmente se vaya a otro sitio de interés. Ser hincha es reconocer que nuestro ánimo muchas veces depende de un juego, una actividad, donde somos solo espectadores pero que está lejos de nuestro radio de acción o decisión.

Ser de la U, el libro de Mouat, abre compuertas en la que todos y todas podemos ingresar. Las respuestas dependerán de nuestro club y nuestros colores. Pero al final, nos veremos como dos siluetas del mismo espejo. Los hinchas, en el fondo, nos parecemos demasiado. Por eso es absurda la disputa entre aficiones. Porque nos estamos convirtiendo un autogol mayúsculo.

Ser hincha es comprender que una camiseta nos define con sentido de identidad y pertenencia.

No me gusta el Curi.

Soy del Curi.

Aunque gane.