"David Pizarro es mi Xavi"
El ex delantero se declara un admirador de la propuesta de Pep Guardiola porque el "Bayern muestra cómo se puede jugar bien, ganar y gustar". Además, dijo que su amigo y ex compañero, Arturo Salah "es el ideal para dirigir el fútbol chileno".
Alfredo Arias estuvo entre tres países: Ecuador, Colombia y Chile. Cuando puso en la balanza los costos y beneficios, no tuvo dudas y escogió por este último. Si bien tuvo acercamientos con clubes chilenos en los que estuvo como jugador, “nunca se pronunciaron, el único que mostró real interés fue Santiago Wanderers” reconoce el uruguayo.
“Lo elegimos porque por varias cosas: la cercanía a nuestro país, el gran trabajo formativo que se realiza acá, la preocupación por los jugadores del club, el potencial del plantel y fundamentalmente porque hay una ciudad tras este equipo y hay mucha hambre de gloria”.
En la primera parte de la década de los ochenta, Alfredo Arias defendió cuatro camisetas en Chile: Palestino, O´Higgins, Huachipato y Trasandino. “Tengo los mejores recuerdos de todos esos años. Guardo grandes amigos desde esa época”, rememora el ex delantero.
Una de esas amistades es el actual presidente del fútbol chileno, Arturo Salah. “Él era una persona diferente al común de los futbolistas. Todos lo admirábamos. Era muy serio aunque hacía bromas. Tenía normas que de repente en Palestino no las podíamos cumplir porque no teníamos los medios”, comenta en su lugar de entrenamiento.
- ¿Le gustó que él se haga cargo de la ANFP?
“En estos momentos es lo que necesita el fútbol. Salah era muy honesto, muy recto, muy todo. Creo que en Chile nadie dirá lo contrario, es una persona ideal para los tiempos que se están viviendo en el mundo directriz no solo de Chile sino de toda Sudamérica. Una persona ideal porque es intachable, seria y responsable”.
- Su federación fue la única que no estuvo envuelta en el pago de sobornos por los derechos televisivos, ¿siente orgullo?
“Tampoco quedamos inmunes pues uno de los tres de Conmebol que recibió sobornos por la misma materia era uruguayo, Eugenio Figueredo. Sólo puedo expresar dolor porque cada vez que hay algo de esto daña la imagen del fútbol para la gente. Se retraen los sponsors, los que quieren ver el espectáculo y después cuesta más que lleguen los dineros para poder pagarle a la formativa, para hacer un proceso. Todo se complica: La desconfianza lo único que trae es duda y la duda paraliza”.
El único club que dirigió antes fue Montevideo Wandereres donde también jugó en dos etapas. Con ellos disputó copa Libertadores y copa Sudamericana en 2015. En la primera enfrentó a Palestino, uno de los cuatro clubes chilenos donde estuvo como jugador. Junto a Boca Juniors avanzó de ronda donde quedó eliminado por un gol ante Racing, el campeón argentino. “Cuando jugué ante Palestino me hicieron dos homenajes, uno allá y uno acá. Enfrentarlos me sirvió para empaparme de a poco con el fútbol chileno”, relata.
- ¿Se topó con una realidad muy distinta a la que conoció en los ochenta?
“Sí. Para alegría mía el fútbol chileno y Chile han crecido mucho desde que yo estuve. Cuando vinimos por la Libertadores a enfrentar a Palestino me impactó el crecimiento que había tenido Chile en todos los sentidos. Los estadios, con los torneos que se han hecho acá, han mejorado muchísimo. Noto que están a primer nivel. Hay preocupación por darle una organización al juego y por profesionalizarlo. En Uruguay no ocurre esto, estamos en el mismo camino pero a nosotros todo nos cuesta un poco más”.
- ¿Considera que a la par de las instalaciones, el nivel del torneo chileno también ha mejorado?
“Creo que el nivel ha crecido, ha evolucionado el juego. Ha mejorado indudablemente. Creo que puede dar más. Todos están convencidos de eso. El potencial es mayúsculo. El futbolista chileno puede dar más”.
-Wanderers disputó la Copa Sudamericana pero sin mayores resultados…
“Esos pequeños traspié sirven mucho para sacar cosas en limpio, para aprender a no repetir los errores que se pudieron cometer. A veces esas caídas son la semilla para sacar buenos frutos a futuro. Es a lo que aspiramos”.
“Guardiola escribió la actual biblia del fútbol”
- El entrenador extranjero que llega a Chile, lo hace con el peso de superar o replicar lo hecho por Marcelo Bielsa y Jorge Sampaoli?
“No. Me genera admiración ver a otros hacer mi trabajo y que lo hagan tan bien. Trato de tener la mente abierta para todos los días aprender. Uno tiene ideas propias y a esas les vas agregando matices porque la evolución del juego obliga. La presión alta no es patrimonio de Bielsa y Sampaoli. Es un patrimonio de Guardiola, de Mourinho también. Hoy el juego va por ese lado. Acá en Chile están muy arraigadas sus figuras más todavía porque han logrado cosas importantes para el fútbol chileno. ¿A mí sabes cómo me sirve? Como incentivo sabiendo que si trabajamos bien, si mostramos profesionalismo y resultados podemos llegar algún día a los lugares que ellos llegaron”.
- ¿Suele mecanizar los movimientos?
“Tenemos una metodología de entrenamiento que la venimos entrenando desde que empezamos a dirigir en la primera división. Hemos tenido relativo éxito en términos de la aceptación del jugador y cómo la manifiesta después en la cancha. Es lo que manda hoy en los grandes equipos. Bayern y Barcelona son la muestra de cómo se puede jugar bien, ganar y gustar”.
- ¿Guardiola es su mentor?
Para mí Guardiola es el que recopiló todos los libritos, los juntó y escribió la actual biblia del fútbol. La metodología que tenemos parte por la pelota. La pelota es la esencia del fútbol. Así nace el gusto por este juego. Ahora Chile tiene a uno de los que más sabe de eso que es Juan Manuel Lillo. Cada vez respeto más a Guardiola. En poco tiempo logró que el Bayern juegue de esa forma y por reflejo que la selección alemana también lo haga. Hay equipos que se enfrentan al Münich y que individualmente tienen mejores jugadores (PSG, Roma, Chelsea, Real Madrid), y son superados en el juego y resultado.
Sampaoli dijo que Iniesta era el mejor jugador del mundo. ¿Para usted cuál sería su Iniesta?
“Es fácil la respuesta: David Pizarro. Para mí él es Xavi. Quizá Iniesta tiene más desplazamiento, más llegada ofensiva pero Xavi hace que otros jueguen. Es el organizador, el que piensa por dónde voy a atacar mejor. Ese para mí es Pizarro. Intentaré aprovecharme de ese jugador y trataré de estar a la altura de la circunstancia de dirigirlo”.
- ¿Lo ve hambriento por volver a su nivel?
“Hemos hecho dobles y hasta triples horarios en estos días. No ha faltado a una sesión, no ha pedido un minuto de descanso pese a que se lo hemos ofrecido. Está con unas ganas bárbaras, es el mejor ejemplo para los más jóvenes. Lo veo muy metido y contento con lo que planteamos. Creo que le viene de maravillas jugar al juego de posesión, tenencia de pelota. Tenemos que rodearlo bien y hacer el esfuerzo por jugar a la velocidad que él juega. Va a andar bien.
- ¿En torno a su figura se va a armar el resto del equipo?
“No, la figura va a ser la idea de juego. Pizarro es un gran intérprete de esa idea. Seguramente el que la ha entendido más rápido porque le acomoda el juego.
- ¿Los dos refuerzos que busca en el medio quiere que lo acompañen?
Exactamente. Eso no quiere decir que vengan y desplacen a los que están acá. Puede que pase todo lo contrario. Solo pienso que el equipo necesita un aire para que esa competencia les haga bien. Pedí dos refuerzos con nombres y apellidos, y te digo más, si no pueden ser esos dos que dirigí- que me dan ganancia de tiempo-, no traemos a ninguno.
- ¿A Jorge Ormeño lo tenía contemplado?
“Cuando nos entrevistaron Ormeño estaba en el equipo. Hicimos todos los análisis y estudios contemplándolo. Pasa que nosotros somos contratados y hay autoridades por sobre nosotros. En los partidos que miramos, él jugó la mayoría de los partidos. Él es un muy buen jugador pero era una decisión tomada desde el año anterior.
- ¿Le acomoda el torneo corto?
Los torneos cortos te dan dos cosas: No tienes revancha, pero cuando se hacen parejos hasta la última fecha tienes chance. La verdad está en la cancha. Para mí es muy importante cada día el entrenamiento. Ahí los jugadores se ganan el puesto, en los partidos sólo confirman cosas. Es mentira que un jugador puede guardarse en un entrenamiento para después hacerlo bien el domingo. O al revés. Hay una correlación. Por eso le doy tanta importancia al entrenar. La tranquilidad del domingo la ganamos en la semana.
- ¿Cuánto le complicaría a Wanderers postergar otro partido por desmanes como ante Colo Colo?
Mucho. Algo así le hace muy mal deporte. Es impensado no poder jugar un partido de fútbol ni siquiera sin público. Ya pasaron unos cuantos días desde que ocurrió y aún no hay nada claro.
- ¿Está dispuesto a ceder la localía por la violencia?
No. No tenemos porqué cederla. A futuro anhelo que podamos pueda hacer uso de nuestro estadio.