Las claves tácticas que tienen a Iquique y Wanderers en la cima
Nortinos y caturros han sido los mejores elencos hasta ahora. Se asemejan en la defensa, pero en mediocampo y ataque todo es distinto.
Merecidamente, Santiago Wanderers y Deportes Iquique encabezan la tabla de posiciones en el Torneo de Apertura. Ambos elencos han mostrado buenos pasajes de fútbol, por sobre la irregularidad propia del comienzo que evidencia el resto de los equipos. Con un desarrollo táctico no muy sofisticado se imponen de manera clara, en lo que va del campeonato.
Por diferencia de goles, los nortinos son los punteros. El cuadro que dirige Jaime Vera emplea un sistema de juego clásico, un 1-4-3-1-2. La distribución de los hombre en la cancha posee como rasgos llamativos la presencia de un volante ofensivo (Gonzalo Bustamante), dos mediocampistas mixtos (Mathías Riquero y Diego Torres) y un "6" neto (Rafael Caroca). Junto a dos delanteros (Álvaro Ramos y Misael Cubillos) que tienen a su disposición todo el ancho de la cancha para moverse e intercambiar posiciones.
Su concepción de juego predominante en el plano ofensivo es el Ataque Construido, en virtud de un mediocampo conformado en rombo. En la faceta defensiva emplea como concepción el Reagrupamiento Defensivo, configurando un bloque compacto de siete jugadores (cuatro defensores y tres volantes) que achica espacios hacia atrás y se torna impenetrable, gracias a buenas dinámicas zonales de presión y cobertura.
Lo de Santiago Wanderers, tácticamente, es un poco distinto. Los pupilos del uruguayo Eduardo Espinel actúan con sistema de juego 1-4-4-1-1. Con los iquiqueños coinciden en los cuatro defensores, pero desde ahí hacia adelante el panorama es disímil.
En la mitad de la cancha lo preponderante es una organización lineal y transversal con Matías Fernández, Ángelo Quiñonez, Luis García y Miguel Terans. Rodrigo Pastorini se ubica por delante de ellos con el propósito de conectarlos con el único delantero, Javier Parraguez.
Aunque en el triunfo ante Universidad Católica el equipo jugó un poco más adelante, lo usual en los porteños es el Reagrupamiento Defensivo detrás de la línea de la mitad de la cancha. Son dos líneas de cuatro muy cercanas, por delante del borde superior del área penal, lo que torna difícil la penetrabilidad por parte del oponente.
En ofensiva, la concepción de juego predominante es el Contraataque, con toques tracendentes de Ataque Directo. Recuperado el balón, los caturros salen muy rápido para sorprender, como contra Universidad de Chile y Audax Italiano. Sino el recurso del pelotazo largo hacia Parraguez es también una vía útil para colocar al equipo en situación de ataque.
En estos últimos aspectos de táctica ofensiva radica la principal diferencia entre ambos líderes. Iquique es más de ir hacia el arco rival mediante sucesiones de pases, triangulaciones y cambios de frente. Wanderers es más directo, va en velocidad, a través de conducciones, con una circulación del balón más acotada o derechamente con juego largo.