Sabino Aguad, el hombre detrás de los exitosos refuerzos de la U

Tras el exitoso periodo de Jorge Sampaoli en la U vino una época llena de fracasos que coincidió con la partida de Sabino Aguad, hasta ese entonces gerente técnico de los azules y responsable de las llegadas de jugadores como Charles Aránguiz, Eduardo Vargas y Junior Fernandes a la tienda azul.

El profesional renunció al equipo estudiantil por diferencias con el casildense y desde ahí las contrataciones no volvieron a ser lo mismo. Andrés Lagos asumió el cargo y lo tuvo hasta que Aguad decidió retornar.

Así por ejemplo, al cuadro universitario llegaron nombres que jugaron muy poco o que cuando lo hicieron jamás pudieron convencer. La lista es bastante larga.

Cuando asumió Darío Franco los azules contrataron a Michael Contreras, Rodrigo Ureña, Ramón Fernández, Isaac Díaz, César Cortés, Juan Pablo Passaglia y Sergio Velázquez. Sólo dos de ellos siguen en la institución, aunque los dos tienen opciones de salir, precisamente, por bajo rendimiento. Del resto, sólo el Toro de Fresia puede decir que tuvo un paso tranquilo en la U.

Luego vino Marco Antonio Figueroa como DT y con él arribaron Juan Rodrigo Rojas, Patricio Rubio, Luis Marín, Rubén Farfán, Marcelo Jorquera, Juan Ignacio Sills, Guillermo Díaz y Bryan Cortés. Sólo Rojas, Rubio y Marín fueron reales aportes y lograron trascender.

Más decidor aún es lo que ocurrió antes de comenzar el 2014. Los argentinos Matías Caruzzo y Rodrigo Mora fueron criticados por el propio Fantasma antes de siquiera debutar. Pocos días después, eso sí, Cristián Romero asumió como técnico interino. Ambos jugadores trasandinos duraron sólo seis meses en el CDA.

Después de eso vinieron los cambios profundos en la U. José Yuraszeck dejó de ser el presidente y Carlos Heller tomó el puesto. De hecho, entendiendo lo que había ocurrido en materia de refuerzos, el actual presidente de la institución logró convencer a Sabino Aguad para que volviese a hacerse cargo de las contrataciones y éste, otra vez, no defraudó.

Con él llegaron Gustavo Canales, Mathías Corujo, Cristián Suárez, Benjamín Vidal, Cristián Cuevas, Sebastián Zúñiga, Joao Ortíz, Gonzalo Espinoza y Guzmán Pereira. Refuerzos que realmente fueron refuerzos.

De hecho, Canales, Corujo, Suárez y Espinoza fueron claves en el título azul. Pereira y Vidal, con menos minutos, respondieron cuando fueron requeridos. Zúñiga jugó poco pero ese era el plan: al delantero querían comenzar a foguearlo. Ortíz no pudo afirmarse y a Cuevas le jugó en contra el hecho de entrenar dos veces a la semana con la sub 20 de Chile.

La U salió campeón y sus refuerzos aprobaron con creces. Detrás de ellos, un silencioso Aguad descansa tranquilo con el saber del deber cumplido.