Figura del clásico
Atajadas de Herrera frenaron a la UC en el momento justo
El meta de la U contribuyó al triunfo del elenco azul con tapadas que le impidieron a los cruzados abrir la cuenta y después acercarse en el marcador.
Como ha sido habitual cada vez que visita San Carlos de Apoquindo, Johnny Herrera fue pésimamente recibido por los seguidores de Universidad Católica. El arquero de la U apareció de los primeros en el terreno de juego para realizar el calentamiento previo y los cánticos en su contra no se hicieron esperar. Pero el hombre ni se inmutó.
Ya en el desarrollo del partido, el meta azul resultó vital para contribuir a la goleada sobre Universidad Católica. En el minuto 16, desvió abajo un tiro potente y muy peligroso de Mark González.
Después, al filo del primer tiempo y cuando la U se imponía por 1-0, Herrera estuvo rapidísimo para achicar en una arremetida de Roberto Gutiérrez. Por si fuera poco, también contó con fortuna en la jugada, pues la pelota a continuación pegó en la base del palo derecho.
En la segunda parte, el arquero azul no tuvo un trabajo insistente, aunque sí estuvo certerísimo en algunas jugadas puntuales. Como ocurrió en la recta final del encuentro, cuando recién la UC había logrado su segundo descuento y se ilusionaba con una remontada casi imposible.
El balón le llegó en el aire a Michael Ríos a pasos del área de meta para batir de volea al guardamenta de la U. El volante cruzado empalmó de derecha la pelota y Herrera achicó, poniéndole el pecho al disparo. Gran atajada y golpe casi mortal a las quiméricas ilusiones del local por acercarse aún más en el marcador.
Sin embargo, los cruzados siguieron batallando y bombardearon el área con un arsenal de centros. Entonces, Herrera mostró su mejor faceta para descolgar en el área los envíos, recibiendo todos los vítores de los seguidores azules, situados al costado derecho de la portería que defendía el golero.
Luego del encuentro, el arquero de la U fue uno de los primeros en abandonar el vestuario sur del recinto cruzado, sin formular declaraciones, por cierto. Irrumpió desde el camarín con un look harto veraniego: polera sin mangas, una gigantesca mochila azulina y short. Un aspecto muy distinto al del resto de sus compañeros, quienes dejaron el lugar con la tenida oficial de los azules: camiseta blanca y pantalón corto azul.