Superclásico Boca-River se suspende por graves incidentes

Un episodio vergonzoso para el fútbol se vivió en la Bombonera. Boca Juniors y River Plate disputaban uno de los duelos más esperados de la semana, y se jugaban su pase a cuartos de final de Copa Libertadores. Pero la demostración de fútbol prometida estuvo lejos de suceder.

Cuando los equipos regresaban a la cancha para jugar el segundo tiempo, el plantel del cuadro millonario fue atacado a través del tunel de acceso. Los hinchas intervinieron la estructura, y lanzaron gases irritantes -se presume que gas pimienta- directo al cuerpo de los fubtolistas.

Fueron cinco los jugadores afectados por la situación. El más complicado fue Leo Ponzio, quien recibió la sustancia en su rostro. Todos terminaron con quemaduras en su piel. Ninguno en condiciones de jugar.

Sin embargo, de forma increible, las autoridades tardaron más de hora y media en anunciar la suspensión del duelo. Algo que, según criterios aplicados en otras ocasiones, debió suceder de inmediato, debido a la gravedad del asunto. 

El clima del superclásico fue hostil desde el arranque, cuando el público local colgó una bandera con un mensaje agresivo contra su rival. Además, provocaron con un dron disfrazado de fantasma que recorrió La Bombonera, a manera de burla por el descenso de River a la segunda división.

Respecto al fútbol mostrado en el primer tiempo, la visita dominó a placer. No hubo goles, pero River estuvo mucho más cómodo en la cancha, con Carlos Sánchez y Rodrigo Mora muy metidos en el partido.

Boca, por su parte, pasó poco a terreno rival. El desempeño irregular de Fernando Gago condicionó a un equipo fracturado en la mitad de la cancha, y que se retrasaba constantemente.

Ahora, queda conocer la resolución. Saber si el encuentro se dará por terminado y River clasifica a la siguiente fase; o si se juega el episodio restante en otra fecha. Además, se esperan duras sanciones para Boca Juniors.