Sociólogo: "Se ha generado identidad a partir del odio"
Andrés Parra analizó los disturbios en el partido entre Everton y Wanderers. "Las autoridades no deben creer que el estadio es como el cine", expresó.
Las imágenes de fanáticos de Everton y Santiago Wanderers agrediéndose brutalmente en la cancha y en las tribunas del Estadio Sausalito causaron conmoción el fin de semana. Los hechos provocaron la suspensión del clásico porteño y significaron un brusco despertar, luego del título logrado por Chile en la Copa América.
Al respecto el sociólogo deportivo Andrés Parra señaló que "hay un tema de acceso al estadio, porque cualquier ciudadano común se pregunta cómo ingresaron estos sujetos. Llama la atención la cantidad de armas que portaban y la cantidad de gente que entró a la cancha. Algunos pensaron que el precio de las entradas iba a ser como un filtro para ciertos sujetos. Sin embargo, no lo fue".
"El fútbol genera un espacio de comunicación que es el último que nos va quedando en la sociedad actual, que es muy individualista. Hay pocos lugares donde reunimos a 15 mil personas cada fin de semana. Este espacio lo ocupan los más resentidos contra un sistema que consideran opresivo para expresar su malestar. El cántico de la barra se fue transformando desde un apoyo al equipo hacia un cántico que busca agredir al otro. Se fue generando identidad a partir del odio. La barra hoy día no es organizada, funciona más bien con lo que se conoce como piños, que se identifican más con un barrio o un sector", agregó el profesional de la Agencia Socialmente.
Como ha estudiado en detalle el fenómeno de las barras en el fútbol, a Parra no le llamó mucho la atención que la trifulca se haya dado en el contexto de un encuentro entre equipos de menor convocatoria.
"Ha habido una extensión del fenómeno hacia los clubes menores y también hacia las regiones. Hay un tema de regionalización también. Junto a un malestar porque todo se concentra en Santiago, hay también un malestar frente a la ciudad más poderosa o más acaudalada, por ejemplo. Hay otros clásicos en Chile, que son muy violentos y agresivos, y tienen que ver con esa lógica", sostuvo.
Por último, Parra aseguró que "la solución pasa primero, porque las autoridades cambien el enfoque. Que no sigan creyendo que el estadio es un cine, en donde se paga una entrada y tienes ciertos derechos. El público de la Copa América no es el mismo del fútbol local. Segundo sería que se hicieran respetar los accesos: revisión o carné de identidad, las cosas mínimas y básicas. Si no se pone mano dura en el ingreso de los hinchas, pues no basta con el precio de las entradas, no habrá soluciones. Esto debe ser con Carabineros y no con guardias".