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Fútbol nacional

El DT más joven de la historia se plantea volver a hacer clases

Francisco Bozán dejó Barnechea tras una irregular campaña en Primera B. "Adquirí una experiencia muy grande en un club que entrega muchas vivencias", dice.

Bozán suena como posible ayudante de Hugo Vilches en Wanderers.
Paul PlazaPhotosport

A los 27 años, la vida profesional de Francisco Bozán se encaminaba de muy buena forma. En 2014, al mando de Barnechea en Primera División, el DT y psicólogo fue elegido como el técnico revelación en el fútbol nacional, luego de un excelente segundo semestre dirigiendo al elenco huaicochero. Sin embargo, posteriormente el entrenador más joven de la historia no pudo evitar perder la categoría y, tras una irregular campaña en el ascenso, puso fin a su primera experiencia a cargo de un plantel profesional.

Barnechea

"El paso por el primer equipo es positivo por dónde se mire. Fue una experiencia muy buena en un primer campeonato en Primera División. Pudimos competir de igual a igual con los equipos de la categoría. Después, cuando el equipo se vio diezmado, tuvimos varias complicaciones y se termina con el descenso del club, lo que al final nutre de bastante experiencia también", manifiesta Bozán a AS Chile.

"En Primera B se realizó una campaña en la que se cumplió con el objetivo del club, que era ser una plataforma de jugadores jóvenes. Jugábamos con cuatro o cinco juveniles. Hicimos debutar cerca de 20 jugadores que era un poco lo solicitado. Iniciamos una buena campaña, pero a mitad de este semestre, a partir del partido contra La Serena, se vio más disminuido el rendimiento. Pero para mí la raya para la suma es bastante positiva. Adquirí una experiencia muy grande en un club donde lo que más entrega es vivencias a nivel individual", agrega.

-Tal vez fue una gran osadía partir, con 27 años, dirigiendo en Primera División y sin haber jugado fútbol profesional.
-El objetivo inicial era partir en Primera B. Pero el fútbol da condiciones que son inmanejables, como fue la salida del técnico (Hugo Vilches) en ese momento. Después de él, el técnico que venía preparándose en el club era yo. Eso iba a suceder a mitad de este año, cuando Hugo terminara su proceso. Pero él renuncia, se va y a mí me dicen que llegó el momento de asumir. Por supuesto que hubiera sido un proceso más gradual tomar al equipo en Primera B. Pero no me arrepiento, demostré que se podía hacer una buena campaña, cuando estaban las condiciones para competir.

-Seguramente, usted tenía una idea acerca de lo que era dirigir en Primera, ¿fue cómo pensaba?
-Era exactamente lo que ya había visto. Tenía muy buena relación con todos los técnicos que habían pasado por el primer equipo. Conocía el trabajo que se desarrollaba y las herramientas que había para poder desenvolverse. No fue una sorpresa y, cuando surgió la posibilidad de asumir, la acepté de inmediato.

-¿Le ha resultado difícil digerir estar fuera del club después de haber sido reconocido como entrenador revelación?
-En el momento, yo dije que no por haber recibido un reconocimiento iba a ser el mejor técnico. Ocurrió el descenso y no por eso tampoco me sentía el peor técnico. Se fueron dando bastantes variables para que Barnechea volviera a Primera B. Y el proceso en Primera B, por el momento de la planilla, los jugadores traídos y los objetivos del club, termina en que el objetivo a nivel de plataforma de jugadores se cumple y a veces a nivel de rendimiento eso no va directamente relacionado. Me imagino que Barnechea, a largo plazo, se va a transformar en algo parecido a lo que pasó con otros clubes, con jugadores que logran adquirir experiencia y terminan compitiendo por un ascenso.

-¿Cómo se proyecta de ahora hacia adelante? Su nombre suena en Wanderers como potencial ayudante si llega Hugo Vilches. 
-Estoy viendo algunas opciones. Algo que se relacione directamente con mi idea deportiva. Un proyecto entretenido e interesante de realizar. Pero el tema de la ayudantía técnica con Hugo Vilches me sorprende un poco. Él ya tiene su colaborador, que es Hernán Peña y me parece que realizan un buen trabajo. Yo lo conocí en Barnechea, pero nunca fui su ayudante. Solo trabajé en las series menores.

-Por varios años hizo clases en el INAF, ¿piensa regresar a la docencia?
-Se comunicaron conmigo desde el INAF y probablemente vuelva a allá a hacer clases. Es mi casa, me gusta mucho la docencia y también el rendimiento. Son dos cosas que me llenan bastante. Después de dirigir un año y medio al primer equipo de Barnechea, creo que podría complementar hacer clases con la dirección técnica también. Ser profesor permite la actualización de conocimientos constante y ésa era una de las gracias de estar en el INAF. Permite mantenerse al día en nuevos conocimientos y en nuevas metodologías de entrenamiento.