La historia del goleador chileno de la liga universitaria de EEUU
Hizo cadetes en Unión Española y Cobreloa, pero hoy la rompe en la Park University de Kansas. Está becado estudiando dos carreras. Un ejemplo.
Luego de jugar en las inferiores de Unión Española (2009-2010) y Cobreloa (2011), Mario Erpel decidió volver a su natal Osorno para terminar Cuarto Medio. El sueño de ser futbolista parecía esfumarse, por lo que decidió enfocarse en los estudios. En la Región de Los Lagos retornó a la Selección amateur de su ciudad, equipo que defendió desde niño y del que dio el salto a Unión. En eso estaba hasta que una noticia cambió su vida.
Una empresa lo contactó para conseguirle una beca en alguna universidad de Estados Unidos. Lo ofrecieron como un "9" potente y de buen finiquito, ideal para la poderosa Park University de Kansas, que por aquellos días buscaba imperiosamente un goleador. Allí está desde agosto de 2013.
"La empresa te consigue la beca y tú tienes que pagarle el 2% ó 3% como retribución, porque la universidad no sólo te paga los estudios, si no que además te entrega un salario, dependiendo de la beca y el porcentaje de cada jugador. Yo estoy en el Top 3 de mi equipo, por lo que el sueldo me sirve para arrendarme un departamento y pagarme la comida", cuenta Erpel.
La experiencia, dice Mario, ha sido fabulosa y hoy puede decir con satisfacción que está compatibilizando sus dos pasiones: el fútbol y los estudios. "Lo único que te piden es que rindas en la cancha y en las clases. Me dieron una beca de cuatro años para que terminara mi carrera, pero yo me decidí y estoy estudiando dos (Negocios Internacionales y Administración de Empresas) para aprovechar al máximo la oportunidad", recalca.
Los torneos en los que compite por la Park University se dividen por conferencia y duran sólo cuatro meses, de agosto a diciembre, pues el resto del año el duro invierno y la nieve impiden cualquier actividad al aire libre.
Lo que más destaca el goleador osornino, en todo caso, es la multiculturalidad a la que se ha enfrentado. "En mi equipo sólo hay cuatro jugadores norteamericanos. Los demás somos cuatro chilenos y gente de Brasil, Francia, Alemania, Tanzania, Gambia, Trinidad y Tobago y varios países más. Acá ya aprendí inglés y portugués, algo que será muy valorado cuando quiera trabajar en lo que estoy estudiando. El fútbol me ha servido para formarme y culturizarme, y quiero seguir haciéndolo", comenta.
Sobre su futuro, Erpel prefiere ir paso a paso, aunque ya tiene algunos planes. La MLS no está en ellos. "Tengo 20 años y si hubiese sido lo suficientemente bueno para romperla estaría jugando en un primer equipo, pero se me dio esta oportunidad y hay que comenzar a compatibilizarlo. No estoy en un primer equipo, pero estoy becado en una universidad muy grande en EEUU y jugando bien", dice.
"Una vez que termine mis estudios voy a ver si puedo meterme en algún equipo de los ´países chicos' de Europa. Jugar en universidades de EEUU es muy bien visto en esos lados, así además aprovecho de seguir formándome y aprendiendo idiomas. Tengo que aprovechar esta oportunidad al máximo", cierra el goleador chileno.